PAMPLONA, 27 Oct. (EUROPA PRESS) -
El vicepresidente primero y consejero de Presidencia, Administraciones Públicas e Interior del Gobierno de Navarra, Roberto Jiménez, ha afirmado que el recorte aplicado a los ayuntamientos en 2011, aunque no sea "una buena noticia", ha quedado en "un mal menor" tras las negociaciones desarrolladas entre el Gobierno y la Federación de Municipios y Concejos de Navarra, y ha advertido de que "las consecuencias podían haber sido mucho más duras".
Roberto Jiménez ha recordado, en respuesta a una interpelación del PP en el pleno del Parlamento, que, aunque inicialmente se había previsto un recorte a los ayuntamientos de 13 millones de euros en su Fondo de Transferencias Corrientes, finalmente se ha rebajado esta cifra a los 5 millones de euros. Los ocho millones de diferencia se detraerían de partidas del fondo de inversiones que no están afectas a ninguna entidad local.
El consejero ha resaltado que "el ajuste se ha hecho con el diálogo con los ayuntamientos, la negociación con sus representantes y la capacidad de alcanzar acuerdos, si no las consecuencias podían haber sido mucho más duras, así que lejos de trasladar que las consecuencias iban a ser catastróficas, son asumibles".
El consejero ha destacado que el departamento de Administración Local en los últimos años "ha venido registrando unos incrementos muy importantes, tan es así que en 2011, cuando el resto de departamentos caía, éste incrementaba su presupuesto, porque los ayuntamientos son una parte fundamental de la Administración, pero en un contexto como este deben estar a las duras y a las maduras".
Roberto Jiménez ha insistido en que, "aún pidiendo un esfuerzo importante, es menor que el que ha hecho el Gobierno, entendemos que es una medida asumible, y esperemos que en los próximos años las cosas vayan mejor para que todas las administraciones tengan mejor financiación".
Así, Jiménez ha afirmado que, aunque "no se puede decir que es una buena noticia, es un mal menor, es un acuerdo razonable", y ha resaltado que se pide a los ayuntamientos "un esfuerzo solidario y menor que el que está haciendo la Administración foral". Además, ha expresado su agradecimiento a la FNMC "por su talante, por sus formas y por su comprensión".
El parlamentario del PPN Eloy Villanueva ha dicho que "lo lógico hubiera sido una vez más no actuar con descoordinación, explicar la situación a los ayuntamientos y después tomar las decisiones, no negociar a posteriori".
Además, ha criticado que, después de la intervención en esta materia también del consejero de Economía y Hacienda, "da la sensación de que el Gobierno actúa de manera disociada entre los dos vicepresidentes" y ha pedido que "terminen de una vez por todas con estas contradicciones que parece que se han vuelto a dar".
Eloy Villanueva le ha propuesto que cuente con el PPN "si quiere llegar a acurdeos que den certidumbre y confianza a los ciudadanos" y ha censurado que "los recortes han causado bastante desasosiego" en los ayuntamientos.
Jiménez le ha replicado que "las bicefalias están más en su imaginario, el Gobierno es uno y toma decisiones en su sesión de Gobierno".
UPN, A "MINIMIZAR" EL RECORTE
En el turno de intervención del resto de grupos, el parlamentario de UPN Eradio Ezpeleta ha valorado que el recorte se haya rebajado de 13 a 5 millones de euros y ha defendido que el grupo regionalista "ya trasladó al Gobierno su preocupación" para intentar "minimizar" este recorte. "UPN, como fuerza mayoritaria en el ámbito municipal, y garante de la autonomía de los ayuntamientos, ha trabajado para minimizar las consecuencias del recorte", aunque ha apuntado que al mismo tiempo los ayuntamientos colaboran con el cumplimiento del objetivo de déficit.
Por su parte, la parlamentaria del PSN Maite Esporrín ha dicho que "se ha conseguido que las medidas de ajuste afecten lo menos posible" a los ayuntamientos, y ha abogado por estudiar para el futuro "una reducción de gastos, sin mermar la calidad de los servicios que se prestan, por ejemplo, mancomunando servicios".
El parlamentario de Nafarroa Bai Xabi Lasa ha dicho que "los ayuntamientos no son un capítulo del Gobierno, no son otro departamento que dependa del Gobierno, son una Administración local y no se puede aceptar que una Administración quite dinero de otra Administración para recortar su déficit".
Desde Bildu, Víctor Rubio ha dicho que "el pequeño amago que se hizo desde el Gobierno de dar un golpe en la mesa y luego negociar para que el recorte sea menor, nos parece fuera de lugar de la acción de un Gobierno serio". Además, ha criticado que "el anterior Gobierno de Navarra no hizo los deberes y para salvar la situación, pretende pasar el marrón al hermano pequeño, el más débil, los ayuntamientos".
El parlamentario de Izquierda-Ezkerra Txema Mauleón ha señalado que han asistido a un "sainete", "porque se les ha dicho a los ayuntamientos que se tienen que quedar con la mitad de la comida, y ahora se les ha dicho que en vez de quitarles las alubias, les quitamos el filete".
