av2" class="NormalTextoNoticia" itemprop="articleBody">
Afirma que "no se puede explicar por qué recortamos en Salud para que nos queden bien las cuentas"
PAMPLONA, 30 Sep. (EUROPA PRESS) -
El exdirector gerente del Servicio Navarro de Salud (SNS) Juan José Rubio ha afirmado que desde el momento en que llegó al cargo hace 14 meses encontró "muchas resistencias" con el equipo directivo del servicio y ha apuntado que "las dificultades fueron creciendo y se convirtieron en limitaciones extremas".
Juan José Rubio, que ha comparecido en el Parlamento de Navarra para explicar su salida del SNS, ha afirmado que "el director del Complejo Hospitalario de Navarra, el director de Atención Primaria y el director de Administración y Servicios Generales, desde muy pronto, no quieren trabajar conmigo y le plantean a la consejera su idea de dimitir si yo sigo ahí".
Rubio ha explicado que siempre mantuvo "el dilema personal de seguir o irme" y ha reiterado que, cuando el pasado mes de junio la consejera le pidió que trabajara "sólo" desde su despacho, se desencadenó su decisión definitiva de abandonar el cargo.
Según ha señalado, cuando empezó a trabajar "en seguida" notó "las primeras reticencias". "Quería conocer los centros de salud y el directo de Atención Primaria no lo admitía. Mi presencia en los hospitales era objeto de queja por el director del Complejo. Me quería reunir con los sindicatos y se me decía que no hacía falta", ha dicho.
Juan José Rubio ha considerado que el gerente del SNS debe tener una doble agenda por la que se encargue de la gestión del día a día y al mismo tiempo de la transformación del sistema, y ha explicado que "al pedirme la consejera que trabajara en el despacho" se hizo "imposible" su tarea.
Ha detallado que en septiembre y octubre de 2013 miembros del equipo directivo le dijeron que no querían trabajar con él y posteriormente la directora general de Salud le pidió que se trasladara a las oficinas de la calle Amaya para trabajar desde allí, "a lo que me negué".
"Unos días más tarde, la consejera decidió trasladarse desde la calle Amaya y ocupó el despacho que yo utilizaba hasta entonces. Comenzó a supervisar mi trabajo y a finales de junio me volvió a pedir que me quedara en el despacho, con la explicación expresa de que si no lo hacía sería cesado", ha asegurado.
"HACIENDO BIEN LAS COSAS SE AHORRA"
En otro orden de cosas, ha afirmado que "no se puede explicar por qué recortamos en salud para que nos queden bien las cuentas a corto plazo" y ha señalado que "haciendo bien las cosas se ahorra dinero y cuando intentamos primero ahorrar, vamos a hacer mal las cosas".
Así, ha asegurado que "la crisis económica lleva a algunas decisiones de recortes, y no todas ellas se pueden explicar", y ha afirmado que en este momento el sistema público sanitario de Navarra "debe ser refundado radicalmente" y necesita una "profunda metamorfosis".
A su juicio, "Osasunbidea tiene que rehacerse, tiene que madurar y transformarse, es imprescindible garantizar la transparencia, que se sepa quién toma qué decisiones". "Yo podía haber dimitido en silencio, pero he elegido hablar porque es muy importante iniciar una conversación para impulsar la transformación en el SNS", ha indicado.
Juan José Rubio ha indicado que en tiempo de bonanza económica se hicieron "grandes edificios faraónicos y nos dejamos en el camino la mejora del confort en las habitaciones de las pacientes, algunas sin cuarto de baño o con espacios compartidos para varios pacientes, o la actualización de espacios clave como la farmacia, que siguen siendo lo mismo que en el siglo XIX".
Ha añadido que cuando llegó al cargo "las oficinas eran las mismas que en 1990, con un coste bastante elevado de 400.000 euros", por lo que intentó trasladarlas a espacios vacíos existentes en el Complejo Hospitalario, algo que "no he podido ejecutar".
Rubio ha afirmado que hay "síntomas" que apuntan a que el sistema debe mejorar y ha citado las listas de espera, la equidad ("no todos los navarros tienen el mismo acceso a los servicios que necesitan") o la "insatisfacción" de los profesionales.
"UNA ORGANIZACIÓN ENFERMA"
El exdirector gerente ha indicado que "trabajamos mucho para disminuir estos síntomas, pero tenemos que dar un paso atrás y mirar a la organización, es una organización enferma, que no sólo necesita diagnóstico, sino entender cuál es la raíz de la enfermedad, y trabajar para tener una organización viva, sana y al servicio de todos".
Juan José Rubio ha considerado que es "urgente rehacer" la estructura del SNS y ha afirmado que deben depender directamente de su organigrama un sistema de información, la formación de los profesionales, la comunicación y los servicios jurídicos.
Además, ha considerado que se debe "empoderar" el Consejo de Gobierno del SNS, que "debería ser capaz de reunirse con regularidad y se reúne apenas una vez al año". "El último consejo fue el 15 de abril. En el orden del día propuse un punto quinto sobre propuesta de mejora de la organización, pero por falta de tiempo de la consejera no pudimos llegar a ese punto", ha indicado.
Ha señalado que ha insistido "una y otra vez en que se celebrara el consejo", algo que no ocurrió, y ha explicado que por eso precisamente solicitó que se convocara una reunión del consejo para presentar su dimisión. "No he conseguido que se vuelva a convocar", ha lamentado, para decir que él presentó en el registro su dimisión antes de ser cesado por Marta Vera.
REPROCHES A LA CONSEJERA
La parlamentaria de Bildu Bakartxo Ruiz ha considerado que "es grave tener la enésima dimisión en Salud y es grave tener tres gerentes en el SNS en tres años, porque no puede garantizar ninguna continuidad en el trabajo", pero ha indicado que es "más grave tener a una persona en un despacho y no dejarle hacer su trabajo". "La consejera tendrá que dar explicaciones", ha señalado.
Por su parte, la parlamentaria de Aralar-NaBai Asun Fernández de Garaialde ha señalado, refiriéndose a la consejera, que "para mejorar hay que reconocer que no sé es perfecto y no hay que ser arrogante", y ha indicado que "aunque estamos de acuerdo en reconocer el sistema que tenemos, eso no quita para que en los últimos años haya ido a peor".
La parlamentaria de I-E Marisa de Simón ha afirmado que la salida de Rubio del SNS "evidencia el fracaso de la consejera Vera al frente del departamento de Salud" y ha citado "la evidente mala gestión en las listas de espera, la participación inexistente o la falta de transparencia".
Por parte de Geroa Bai, Manu Ayerdi ha destacado que la explicación de Rubio le ayuda en su "reflexión estratégica" respecto al SNS y se ha interesado por la transparencia en el servicio, para preguntar quién tomaba las decisiones. "Si se han tomado decisiones importantes y no las ha tomado usted, ¿quién las ha tomado? ¿usted no podía decidir?", ha preguntado.
El portavoz de UPN, Antonio Pérez Prados, ha dicho que "hubiese deseado por el beneficio del SNS y de los pacientes que Juan José Rubio hubiese tenido el mayor de los éxitos" y ha lamentado que "su comparecencia en comisión sirva para atacar a la consejera de Salud y se hace por aquellas personas que son las defensoras de la promoción de la mujer, será de algunas mujeres, de las que están en su onda".
El parlamentario del PSN Samuel Caro ha indicado que la salida de Rubio "es el anuncio de un fracaso del Gobierno foral y especialmente de la consejera de Salud, que no ha estado a la altura para poder conformar equipos de confianza para abordar un proceso realmente complicado, como la unificación de los hospitales o la transformación de la sanidad navarra".
Finalmente, la parlamentaria del PPN Eva Gorri ha indicado que Rubio "ha hablado muy poco de los aspectos que rodearon su dimisión y sí mucho de cómo está la sanidad navarra, e indudablemente todos queremos mejorarla". Ha añadido que "la frase que más llama la atención es que la consejera le pidió que se quedara en su despacho".
