ESTAMBUL (TURQUIA), 27 Feb. (del corresponsal de EUROPA PRESS Ildefonso González) -
El ilegalizado Partido de los Trabajadores del Kurdistán (PKK) se dispone a perpetrar asesinatos contra diplomáticos turcos y a colocar bombas contra intereses de este país en Europa a pesar del alto el fuego declarado por la guerrilla el pasado otoño, según informó la revista local 'Aksiyon'.
El objetivo del PKK es emular los atentados que el grupo terrorista Ejército Secreto Armenio para la Liberación de Armenia (ASALA) ejecutó dentro y fuera de Turquía durante las décadas de 1970, 1980 y 1990. Sus acciones violentas, que el ASALA consideraba un medio para conseguir que Turquía reconociese el genocidio armenio y crear una Armenia independiente en el este de Anatolia, terminaron con la vida de decenas de ciudadanos y diplomáticos turcos.
Según la publicación, el PKK tomó la decisión después del reciente golpe asestado por las autoridades francesas y belgas contra la guerrilla. La Policía gala detuvo a principios de febrero a 14 kurdos acusados de blanqueo de dinero, financiación del terrorismo y asociación de malhechores con fines terroristas. Durante los interrogatorios, varios de ellos aseguraron que estaban en contacto con la Dirección de Vigilancia del Territorio (DST), según el diario 'Le Parisien'. El pasado día 23, ocho de los 14 imputados fueron puestos en libertad.
La operación de las fuerzas de seguridad europeas indignó a la dirección del PKK y, sobre todo, a su líder Abdullah Ocalan, que cumple cadena perpetua en una cárcel turca, ya que supuso el desmantelamiento de una de las principales redes financieras del grupo terrorista. "Europa siempre hace trampas; no son de confiar", declaró Ocalan según sus abogados.
Asimismo, los rumores de una eventual operación del Ejército turco en la frontera con Irak, e incluso en el norte del país vecino, constituyen un elemento desestabilizador para la guerrilla, agrega 'Aksiyon'.
El PKK declaró una tregua unilateral a principios de octubre a instancias de Ocalan. Sin embargo, el Ejército turco ha hecho oídos sordos al alto el fuego y ha continuado con sus acciones contra la organización armada. En opinión de la revista, el PKK vive "momentos difíciles" en las montañas del norte de Irak, por lo que se dispone a "lanzar un nuevo plan para perpetuar su existencia".
Por otra parte, la Policía y la Gendarmería turcas han sido puestas en alerta máxima ante la intención del PKK/Kongra-Gel (que no respeta la última tregua) de llevar a cabo atentados con bomba contra edificios ministeriales y de la Administración Pública en Ankara, antes de que empiecen los festejos del 'Nevruz' (Año Nuevo kurdo) el próximo 21 de marzo, según informó hoy el diario 'Zaman'.
