MOSCÚ, 29 Ago. (EUROPA PRESS) -
Los servicios de rescate han recuperado los cuerpos de siete obreros de entre los escombros del edificio en construcción que se vino abajo ayer en Bakú, mientras la Policía estima que cerca de 40 personas podrían permanecer sepultadas aún, según informa la agencia rusa RIA Novosti.
Además, según anunció hoy el Ministerio de Situaciones de Emergencia azerí, nueve obreros fueron rescatados con vida por los servicios de emergencia que trabajan en el lugar de la tragedia, donde se encuentra hoy el presidente del país, Ilham Aliyev. Según la cadena Azerbaijan News Service, los rescatados consiguieron contactar con sus móviles con familiares y amigos y decirles que estaban atrapados en el sótano.
La Policía azerí estima que al menos 38 personas siguen atrapadas bajo los escombros del edificio de 16 plantas, mientras que la empresa constructora habla de 60 atrapados.
Aparentemente, según los primeros indicios, la causa del derrumbe se debió al incumplimiento de las normas de seguridad en la obra, iniciada hace cinco años, de ahí que el fiscal de Bakú, Aziz Seidov, haya abierto un caso criminal sobre lo ocurrido. De hecho, los medios locales afirman que dos gerentes de la construcción ya han sido detenidos.
Un portavoz de la empresa constructora asegura haber escuchado una explosión antes de que el edificio se viniera abajo, pero su relato no ha sido confirmado por ningún otro testigo. Sin embargo, otros testigos afirman haber sentido un temblor de tierras antes del derrumbe, pero este extremo ha sido negado por las autoridades locales.
