Publicado 01/03/2017 08:00

Carmen Tomás.- A la caza del negocio de la estiba

MADRID, 1 Mar. (OTR/PRESS) -

La aprobación del Real Decreto Ley de liberalización y modernización del sector de la estiba en España no ha contentado a los poco más de 6.000 trabajadores al sector. Muy al contrario, los estibadores siguen amenazando con una serie de huelgas que comenzarían oficialmente el próximo 6 de marzo. Sin embargo, las empresas del sector están denunciando que los trabajadores están llevando a cabo paros encubiertos que ya en algunos puertos como el de Valencia están provocando pérdidas de 2,1 millones de euros diarios. Hace unos días hacíamos cuentas de lo que podría costar cada día de huelga en los puertos de España y la cifra se eleva a 50 millones de euros. Sumen las pérdidas por puertos y comprobarán que es así.

Por los puertos de España entran y salen mercancías que suman algo más del 20 por ciento del PIB de España. El roto que van a hacer los estibadores a la economía española, que están haciendo ya, es tremendo y puede ser fatal, si como está ocurriendo numerosas empresas están desviando su carga a otros puertos por miedo a que no pueda descargarse, que se descargue a destiempo o sencillamente sufran daños. Incluso publica El Confidencial que Marruecos está al acecho para hacerse con parte del trabajo de los puertos españoles aprovechando los paros y las amenazas que sobre las mercancías han lanzado los trabajadores españoles.

Es obvio que los estibadores no quieren perder sus privilegios y que quisieran estirar el periodo transitorio más allá de los 3 años que contempla el Real Decreto Ley. En este sentido hay que recordar que estos trabajadores por pertenecer al sector de trabajadores del mar pueden jubilarse mucho antes que cualquier otro trabajador. Poco más allá de los 50 y que lo que pretenden los estibadores alargando los plazos es llegar en un número importante a la jubilación y ya si acaso los más jóvenes que arreen.

Desconozco si el gobierno se está planteando alguna medida que evite las pérdidas millonarias que ya se están produciendo en los puertos y en la economía y las que pueden venir si otros se hacen con el negocio. Supongo que esperará a que se convalide en el Congreso el Real Decreto Ley. Pero, esto llevará su tiempo y puede ser demasiado tarde para el sector. Parece que estos trabajadores no están dispuestos a los cambios ni por supuesto se van a comportar de forma responsable. Esto acaba de empezar y puede tener un mal final.

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