MADRID, 6 May. (EDIZIONES/Portaltic) -
Una nueva tecnología, desarrollada por investigadores de la Universidad Carnegie Mellon, en Estados Unidos, permite usar la piel del brazo como una extensión 'touchpad' para los 'wearables'.
La pequeña pantalla de dispositivos ponibles como los 'smartwatches' en ocasiones puede dificultar la navegación por la interfaz. Esta nueva tecnología permite usar la piel del brazo como una extensión para manejar el dispositivo de una forma más cómoda.
La tecnología, SkinTrack, emplea un anillo, que se coloca en el dedo con el que el usuario suele manejarse por la pantalla, que registra los movimientos y envía una señal a una banda colocada en el reloj inteligente.
Lo que hace este conjunto es rastrear la posición del dedo sobre la superficie de la piel, incluso distingue entre pasar por encima del brazo sin tocarlo y realizar distintas presiones sobre él, y en función de la información recogida, se reproduce la función correspondiente a cada gesto en una pantalla.
Para sus creadores, esta tecnología "no es intrusiva", porque se basa en elementos que "la gente ya lleva a diario", como un reloj o un anillo. "Vemos la tecnología integrada en futuros 'smartwatches', soportado ricas interacciones táctiles más allá de los límites de la pequeña pantalla", han explicado el equipo en la descripción de la tecnología en YouTube.
