The Elder Scrolls Online: Morrowind, una expansión que te devuelve al pasado de la saga

The Elder Scrolls Online: Morrowind
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Actualizado: lunes, 19 junio 2017 16:58

   MADRID, 19 Jun. (EDIZIONES/Portaltic) -

   Los fans de The Elder Scrolls están de suerte. La tierra de Vvardenfell, uno de los paisajes de Tamriel más recordados y queridos por los seguidores de la saga, está de vuelta en forma de expansión. The Elder Scrolls Online: Morrowind permite revivir aquella zona desde la perspectiva de un MMO y con una calidad gráfica notablemente mejor que en el juego original.

El título tiene como misión principal ayudar al dios Vivec, quien ha ido perdiendo fuerza con el paso del tiempo por culpa de los Daedras y a quien hay que ayudar a recuperar su poder. La trama entera ocurre en la isla de Vvardenfell y a pesar de tratarse de una expansión, se puede jugar la historia desde el minuto cero, sin necesidad de llegar a cierto nivel, de conseguir determinadas cosas o de haber completado algo de The Elder Scrolls Online previamente.

El juego ya está disponible para PC, Xbox One y Playstation 4 en diferentes ediciones que van desde los 39,99 euros hasta los 99,99 euros, dependiendo de si se trata de copias digitales, de si es edición coleccionista e incluso de si se tiene o no The Elder Scrolls Online ya comprado.

30 HORAS DE CONTENIDO Y UNA NUEVA CLASE

La expansión no es un DLC al uso, sino que, como bien hemos señalado, no necesita nada para jugarse previamente. Si eres un jugador nuevo, el tutorial te embarcará directamente en la aventura; si tienes recorrido dentro de The Elder Scrolls, puedes traer tu personaje a Tamriel para disfrutar de las novedades. Con la implantación de OneTamriel, un sistema de equilibrio de mundos, cualquier personaje de cualquier nivel puede jugar y no aburrirse, ya que los enemigos se equilibran a ti para que no te aburras.

Zenimax Online Studios, la desarrolladora tras Bethesda que ha hecho posible la aventura, ha añadido más de 30 horas de nuevo contenido relacionado con la historia principal, algo a lo que hay que sumarle la gran cantidad de misiones secundarias que te encuentras a lo largo de tu recorrido.

Como inciso por si no estás acostumbrado a jugar a juegos MMORPGs como este, las misiones secundarias son muy interesantes, ya que incorporan gran profundidad a la trama, además de que te ayudan a conseguir experiencia, aumentar de nivel y ofrecen recompensas que no, en ocasiones, no puedes adquirir por otro lado (objetos especiales, por ejemplo).

   

   De la historia no vamos a desvelar mucho para no romper el interés ni hacer ‘spoilers’. Las misiones no son las típicas que se centran en ir de un punto a otro y a correr, sino que están diseñadas para que tengas que perderte por las tierras de Vvardenfell y para que hables con la gente, atendiendo siempre a los diálogos.

Hablando de diálogos y, en general, de voces y texto en el juego, hay que destacar un punto crucial para muchos: está íntegramente en inglés. No hay soporte oficial para el español, por lo que si no domináis la lengua anglosajona, os va a llegar a costar adaptaros a la entrega. Si decidís jugar en PC, hay un grupo de gente ajena a la desarrolladora que está trabajando en un soporte en español; actualmente hay en torno al 60% de The Elder Scrolls Online traducido, pero no está al completo ni el juego base ni la expansión de Morrowind.

En cuanto al tema de la elección del personaje, es muy sencillo crear uno de estos y hay muchas opciones de personalización que puedes toquetear para hacerlo más a tu gusto (raza, clase, cuerpo, cara). Cada personaje tiene tres árboles de habilidades que ir mejorando según nuestros propios intereses y puedes ir empleando los puntos de habilidad y las mejoras en los ataques cuando quieras y en lo que quieras.

Debes saber que con la expansión llega una clase nueva: el Warden. El personaje tiene tres líneas de habilidad: una para invocar bestias salvajes que dañan al enemigo (‘animal companions’), una para curarse y curar a otros con plantas (‘green balance’) y una para hacerse más tanque y soportar golpes más dañinos (‘winter’s embrace’). No es una clase difícil de utilizar y si la coges de cero te resultará muy interesante, sobre todo si vas combinando las distintas habilidades y no te centras solo en una.

El punto clave del juego es claramente es el PVE. La posibilidad de jugar solo o con gente, de pasar mazmorras (seis nuevas Delves y dos “mazmorras públicas”), de participar en una nueva Trial (“The Halls of Fabrication”), de explorar, de luchar contra enemigos Hay gran cantidad de opciones y estrategias de juego que hace que no se quede en una expansión de 30 horas, sino que lleguen a ser muchas más.

El punto negativo aquí va ligado a las mazmorras: no todas son interesantes, algunas se hacen aburridas y monótonas, y uno puede aprovecharse de otros jugadores para pasar algunas sin atacar más que una vez a los enemigos para que den por buena la victoria y/o misión. A no ser que alguien quiera armarse con algo específico de una mazmorra, muchas no acaban de ser todo lo rejugables que deberían.

En cuanto al PVP, es necesario que alcances el nivel 10 para que puedas participar. Con la expansión llega un nuevo modo de juego, ‘Battlegrounds’, que son partidas de unos 10 minutos con tres equipos de 4 jugadores cada uno. Dentro del modo, hay tres partidas diferentes: partida a muerte por equipos, capturar la reliquia y dominación. En general, no se tarda demasiado en encontrar oponentes para jugar, pero en horas puntuales la espera llega a hacerse un poco larga.

TAMBIÉN TIENE SUS PUNTOS MALOS

A pesar de ser un gran MMORPG y de avivar la nostalgia de los seguidores más antiguos, el título también tiene sus partes malas, sobre todo si vienes de nuevas.

El combate, aunque hay un tutorial que detalla, se hace engorroso al principio. El truco no es solo aprender los movimientos básicos de atacar de forma ligera, pesada o de cubrirte, sino ir combinando las habilidades y cuesta cogerle el tranquillo.

El rendimiento también deja que desear. Sí, no hay tantos ‘bugs’ o errores como en el The Elders Scrolls Online original, pero sí que hay problemas. Lo que más hemos notado son caídas de ‘frames’, algún que otro problema al conectar con el servidor y errores visuales de todo tipo (personajes que se caen de una zona alta porque sí, entidades que traspasan el suelo y cosas del estilo).

EN RESUMEN

¿Merece la pena adquirir The Elder Scrolls Online: Morrowin si te gustan los MMORPGs? Sin duda. El juego está muy bien pensado y tratado, se nota que han escuchado una gran parte de las críticas de los propios jugadores y han pensado en ellos a la hora de hacerlo.

El argumento es sin duda la parte más fuerte: la historia no deja indiferente a nadie y es interesante de principio a fin. Morrowind añade contenido de sobra para disfrutar como un niño pequeño. La clase nueva, además, es muy llamativa, sobre todo si se fomenta la rama de habilidad que invoca animales.

La banda sonora tampoco tiene desperdicio alguno. The Elder Scrolls siempre destaca en este ámbito y la expansión no iba a ser menos: te sientes parte del ambiente por cómo te envuelven las melodías y eso, por desgracia, no lo consiguen todos los juegos. La isla de Vvardenfell tiene una estética de 10 y hace honor al paisaje original.

Su gran inconveniente, sin duda, es el tema de que no se pueda disfrutar en español. El idioma es esencial para que haya una inmersión mucho más profunda y el ‘lore’ se entienda y se disfrute mejor, por lo que esto puede ser razón suficiente para que más de uno no termine por adquirir el juego.

Por lo demás, otros detalles a mejorar son el tema del rendimiento y de las mecánicas de combate, aunque te acabas acostumbrado a éstas últimas conforme van pasando las horas.