El aumento de oxígeno dirigió la evolución de la vida animal

microorganismo
OLIVER VOIGT/WIKIMEDIA COMMONS
Actualizado: viernes, 17 diciembre 2010 19:28

MADRID, 17 Dic. (EUROPA PRESS) -

Investigadores financiados por la Universidad de Oxford han descubierto una pista que podría ayudar a explicar por qué la evidencia más temprana de la vida compleja de los animales multicelulares aparece hace unos 550 millones de años, cuando los niveles de oxígeno atmosférico en el planeta aumentaron considerablemente, de un 3% a su nivel de hoy en día del 21%.

El equipo, dirigido por el profesor Chris Schofield, ha encontrado que los humanos comparten un método de detección de oxígeno con el más simple de los animales vivos conocidos en el mundo - Trichoplax adhaerens - lo que sugiere que el método ha existido desde que los primeros animales surgieron alrededor de hace 550 millones de años.

Este descubrimiento, publicado en la edición de enero de 2011 de EMBO Reports, arroja luz sobre cómo los seres humanos fueron sensibles al oxígeno y cómo los niveles de oxígeno impulsaron las primeras etapas de la evolución animal.

El profesor Schofield dijo: "Es absolutamente necesario para cualquier organismo multicelular tener un suministro suficiente de oxígeno a la célula por lo que el aumento en el oxígeno atmosférico hizo posible que los organismos multicelulares existiran".

"Pero hay todavía un reto fisiológico muy diferente para estos organismos respeto a los organismos unicelulares evolutivamente más antiguos como las bacterias. En seres multicelulares el oxígeno no llega a las células en la superficie del organismo. Creemos que esto es lo que impulsó a los antepasados de Trichoplax adhaerens para desarrollar un sistema para detectar la falta de oxígeno en una célula y luego hacer algo al respecto", explicó.

Trichoplax adhaerens es un organismo de agua de mar pequeo que carece de alguno de los órganos y sólo tiene cinco tipos de células, dando la apariencia de una ameba. Mediante el análisis de cómo Trichoplax reacciona a la falta de oxígeno, el doctor Christoph Loenarz ha encontrado que utiliza el mismo mecanismo que los seres humanos: de hecho, cuando la enzima clave de Trichoplax fue puesta en una célula humana, funcionó tan bien como la enzima humana.