PAMPLONA, 23 May. (EUROPA PRESS) -
Condenados por los altercados que se produjeron en el chupinazo de los Sanfermines de 2010 han convocado una manifestación para el 29 de mayo en Zizur Mayor para mostrar su rechazo a la sentencia del Tribunal Supremo que confirma la condena impuesta por la Sección Tercera de la Audiencia de Navarra a doce acusados por estos hechos.
En concreto, la Audiencia de Navarra condenó en febrero de 2014 a tres años y seis meses de prisión al acusado de lanzar una botella que hirió gravemente a un joven durante el chupinazo y a otras once personas por los altercados que se produjeron.
El condenado por el botellazo y otros cinco condenados recurrieron la sentencia que ha sido confirmada por el Tribunal Supremo, que, por el contrario, revoca la declaración del Ayuntamiento de Pamplona como responsable civil subsidiario.
Ocho de los condenados han comparecido este sábado en rueda de prensa en Pamplona para anunciar que se manifestarán contra esta sentencia el 29 de mayo a las 19 horas desde la plaza de la Mujer de Zizur Mayor. Además, han anunciado que llevarán a cabo una concentración frente al Palacio de Justicia el 9 de junio, fecha en la que se comunica el ingreso en prisión del condenado por el botellazo.
Ibai Moreno en euskera y Aitor Sola en castellano han considerado "intolerable" la pena impuesta y han criticado que el Tribunal Supremo "vuelve a avalar la violenta actuación policial para eximir de toda responsabilidad al Ayuntamiento de Pamplona sobre los hechos sucedidos".
De este modo, han añadido, "corrige la sentencia del Tribunal Superior de Justicia de Navarra, en la que, a sabiendas de que la culpa fue de la Policía Municipal, condenó al Ayuntamiento, no por esto, sino por permitir el acceso de botellas de cristal". "La sentencia del Tribunal Superior de Justicia de Navarra fue una chapuza", han añadido.
Por otro lado, Sola ha destacado que han sido condenados "por intentar sacar la ikurriña y defenderla en el chupinazo" y ha censurado que "la obsesión de UPN contra la enseña vasca y su afán por borrarla de las calles es lo que lleva a que todos estos jóvenes seamos condenados y a que uno entre en prisión en los próximos días".
"Año tras año la Policía Nacional y la Policía Municipal ha tratado de impedir a cualquier precio que la ikurriña estuviera presente en el chupinazo", ha criticado Sola, que ha añadido que "en Pamplona hay ciudadanos de primera y de segunda, y los derechos de todos no se respetan por igual". "Es muy triste que hoy en día la ikurriña siga perseguida y su defensa se castiga con penas de cárcel", ha concluido.
