ROMA, 27 Nov. (EUROPA PRESS) -
El Papa ha arremetido contra las guerras tribales que son "la polilla que roe la sociedad" y "destruye la nación" durante su tercer día y último día en Nairobi de donde partirá esta tarde hacia Uganda para continuar con viaje por el continente africano. (Las mejores fotografías del tercer día del Papa en África).
En un discurso totalmente improvisado en español, en su encuentro con jóvenes keniatas en el Estadio Kasarani, Francisco les ha pedido que se alejen de la corrupción porque no es "azúcar de vida", sino "camino de muerte". "La corrupción es como el azúcar, en el Vaticano también hay corrupción, es un camino de muerte y podemos volvernos todos diabéticos", ha señalado.
Así, ha destacado que el tribalismo "es un desafío" que significa "tener las manos escondidas por detrás y lanzar una piedra al otro".
El Papa ha explicado el espíritu del mal que hace que "un hermano mata a otro hermano".
"El espíritu del mal nos lleva a la destrucción y el espíritu del mal lleva a la desunión, al tribalismo, a la corrupción, a la drogadicción nos lleva a la destrucción por los fanatismos", ha aseverado.
Además ha reflexionado la relación entre "fanatismo ideológico" y el dejar de orar. "Hay una palabra que puede parecer incómoda pero no la quiero evitar. Porque ustedes la usaron antes que yo. La usaron cuando me trajeron los rosarios que habían rezado por mí. Lo primero que yo respondería es: un hombre pierde lo mejor de su ser humano cuando se olvida de rezar. Porque no siente necesidad de pedir ayuda, delante de tantas tragedias", ha asegurado el Pontífice.
"No estamos en el cielo, estamos en la tierra que está llena de dificultades y de invitaciones para desviarte hacia el mal", ha exclamado ante los jóvenes. Así ha subrayado que "la vida está llena de dificultades" pero que hay dos maneras de mirar a las dificultades: "o las miras como algo que destruye o te lo tomas como una oportunidad", ha explicado.
Por ello ha señalado que el camino de la destrucción es una oportunidad para superarlo y llegar "al bien mío, al bien de mi familia, al bien de mi nación".
"Todos ustedes jóvenes tienen una gran capacidad, la capacidad de elegir qué camino seguir si dejarse vencer por la dificultad o transformar la dificultad en una oportunidad para vencer yo", ha dicho.
Así ha puesto un ejemplo. "Ustedes nombraron las dificultades que son desafíos, y yo les hago una pregunta: '¿quieren superar los desafíos o dejarse vencer los desafíos?, ¿Ustedes son como los deportistas que cuando vienen a jugar al estadio que quieren jugar y ganar? O son de los que dan la victoria a los otros y se meten el dinero en el bolsillo?', ha dicho.
Francisco ha llamado a los jóvenes a vencer y superar la tendencia del tribalismo escuchando "el corazón el otro". "¿Cuál es tu cultura?, ¿porqué tu cultura tiene estas costumbre te sientes superior o inferior?", ha inquirido a los miles de jóvenes reunidos ante él.
El Papa ha señalado que el tribalismo es solo vencido "con el oído, con el corazón y con la mano". "Te tiendo la mano para seguir dialogando; si no se escuchan entre ustedes siempre va a haber tribalismo", ha lamentado el Papa.
Por ello ha hecho un llamamiento a la reconciliación y ha pedido a todos que se dieran la manos "como un signo contra el tribalismo". "Somos todos una nación", ha pedido que gritasen todos al unísono. "Así tienen que ser nuestros corazones, no es solo un levantar las manos, hoy este deseo representa la decisión de acabar con el tribalismo", ha señalado finalmente.
