ROMA, 24 Jun. (EUROPA PRESS) -
El Papa ha dirigido durante el Ángelus de este domingo unas palabras a los padres al señalar que "tener un hijo es una misión sublime que hace de cada familia un santuario de la vida".
"Que la Virgen nos ayude a comprender que en cada persona está la huella de Dios, fuente de vida", ha pedido el pontífice asomado a la ventana de su estudio privado.
Al referirse al nacimiento de San Juan Bautista, que hoy celebra la Iglesia católica, el Papa ha subrayado que es necesario "aprender a fiarse y a callar ante el misterio de Dios" y a "contemplar en humildad y silencio su obra". Y ha agregado: "Dios no depende de nuestras lógicas y de nuestras limitadas capacidades humanas".
Francisco ha reclamado, además, que los fieles se hagan "conscientes de que al engendrar un hijo, los padres actúan como colaboradores" de Dios. En este sentido, ha invitado a los católicos a preguntarse: "Cómo es mi fe?, ¿alegre?, ¿abierta a las sorpresas de Dios?,¿es capaz de asombrarse cuando ve tanta gente buena?".
Así, para el Pontífice es importante que los fieles hagan examen de conciencia para determinar el tipo de fe que profesan. Por eso, ha lamentado cuando existe una fe "más bien plana" que no admita sorpresas y ha pedido, en cambio, una "fe alegre, que se asombre, que se sorprenda y que sea agradecida".
