BARCELONA, 4 Mar. (EUROPA PRESS) -
Los Mossos d'Esquadra y la Guardia Urbana de Barcelona han detenido a siete responsables de tiendas de telefonía del barrio del Raval y han recuperado cerca de 400 móviles que pueden proceder de robos, la mayoría 'smartphones' de última generación.
Lo han hecho en una inspección simultánea de 22 establecimientos de compraventa de teléfonos móviles, donde la policía ha identificado a 117 personas, de las que siete han quedado detenidas --cinco por receptación, una por apropiación indebida y otra por orden judicial-- y seis más han sido denunciadas.
En declaraciones a los medios en la calle Sant Pau, donde han realizado la mayoría de inspecciones, el inspector jefe de la comisaría de Ciutat Vella de los Mossos, Jordi García, ha explicado que se trata de una operación importante en la que quieren enviar un mensaje a estos establecimientos para que "no sean el medio para dar salida a móviles robados", y que no entren en la dinámica de ser receptadores.
El inspector subjefe de la comisaría de la Guardia Urbana en este distrito, Benito Granados, ha detallado que esta actuación policial se enmarca en una operación de más alcance que incluye otros comercios que pueden estar "en el límite de la legalidad", como las tiendas de compraventa de oro y las de envío de dinero.
En el operativo policial, desarrollado el 22 de febrero, los agentes localizaron un importante número de teléfonos robados o de procedencia indeterminada, interviniendo cerca de 400 terminales, la mayoría de marcas como iPhone, Samsung y Sony.
De éstos, 33 teléfonos constaban como sustraídos procedentes de robos con violencia e intimidación o hurtos en Barcelona, pero también de otras poblaciones catalanas, y de robos en febrero en tiendas de telefonía móvil de la capital catalana.
La policía investiga la procedencia del resto de teléfonos móviles, aunque apunta a que pueden ser de robos con fuerza en tiendas; los Mossos han podido retornar 30 de los 33 móviles denunciados como robados a sus propietarios.
En la operación del 22 de febrero, a nivel de inspección laboral y con el objetivo de controlar las condiciones laborales de los trabajadores, se levantaron 14 actas de inspección.
Los detenidos, de entre 18 y 43 años y nacionalidad india, inglesa, pakistaní, nepalí y macedonia, tenían antecedentes por delitos de receptación y estafa, y quedaron en libertad tras pasar a disposición judicial.
LES OFRECEN MÓVILES ROBADOS
En declaraciones a los periodistas, un trabajador de un taller de reparación de móviles, 'Unique Mobiles', en la calle Santa Margarida, Nasir Iqbal, que ha sufrido una inspección, ha explicado que los agentes comprobaron los permisos del establecimiento y si sus trabajadores tenían la documentación en regla.
Ha asegurado que no les intervinieron teléfonos aunque ha admitido que a menudo vienen personas que les ofrecen terminales, aunque ellos las rechazan porque saben que "son robadas" y porque en su taller, que lleva abierto un mes, no venden este producto, solo los reparan y liberan.
Desde el verano pasado, los Mossos han realizado 19 inspecciones con un balance de 24 detenidos por receptación y han levantado diversas actas a responsables de las tiendas, entre las que destaca el hecho de no disponer libros de registro; con ésta, el número de arrestados se eleva a 31 y el de inspecciones a 41.
