Enfermedad cardiovascular, cáncer, obesidad y diabetes, además de estrés crónico, entre las posibles consecuencias
MADRID, 10 Mar. (EUROPA PRESS) - Trabajar en horario nocturno o a turnos tiene efectos nocivos para la salud del empleado, que puede ver acortada su vida en un 20%, lo que supondría casi 17 años menos respecto a la esperanza media de vida en la Comunidad, fijada en algo más de 84 años. Además de las consecuencias físicas, crece la posibilidad de sufrir estrés crónico, mayores dificultades para la vida social y relaciones personales y un incremento de la probabilidad de desarrollar hábitos nocivos como trastornos alimentarios y consumo de tabaco y alcohol.