Alrededor de 7.000 personas visitaron Sayalonga el Día del Níspero

Bendodo sayalonga nísperos fiesta
EUROPA PRESS/DIPUTACIÓN
Actualizado: lunes, 4 mayo 2015 9:57

SAYALONGA (MÁLAGA), 4 May. (EUROPA PRESS) -

El municipio malagueño de Sayalonga vivió el pasado domingo uno de sus días más especiales con la celebración de la XXXI edición del Día del Níspero, al que acudieron alrededor de 7.000 personas.

El Ayuntamiento repartió entre los asistentes más de 2.000 kilos de este fruto, 500 litros de vino moscatel y 1.000 botes de mermelada de níspero elaborada por la Asociación de Mujeres de la localidad.

La jornada, declarada Fiesta de Singularidad Turística Provincial por la Diputación, contó con la participación del presidente del ente supramunicipal, Elías Bendodo, quien pronunciaba un pregón en el que animaba a los sayalonguinos a continuar con la producción del níspero.

Bendodo destacaba que este municipio exporta sus frutas principalmente a Italia, y dentro de España a Cataluña y al País Vasco, a través de la Cooperativa de San Isidro.

En este punto se refería al Plan Estratégico de la Axarquía que se presentó el pasado jueves para fomentar su desarrollo económico: "Sayalonga tendrá gran peso en este plan por su importancia en el sector agroalimentario".

NÍSPEROS DE HONOR.

Tras el pregón llegaba el momento de entregar los Nísperos de Honor, que han recaído en la Oficina de Atención a los Alcaldes de la Diputación, en su modalidad provincial; en el humorista y presentador malagueño Manolo Sarria, en la andaluza; y en la Comunidad de Regantes de Sayalonga, a nivel local.

Asimismo, se entregaba un lote de productos del municipio al ganador de la I Jornada Fotográfica Villa de Sayalonga.

Sayalonga tiene actualmente más de 50 hectáreas dedicadas al cultivo del níspero. Esta práctica agrícola va en aumento, ya que son muchas las familias en este municipio que viven de ello.

Este fruto es originario de China y llegó a Europa procedente de Japón en el siglo XVIII como árbol ornamental. En el siglo XIX se inició el consumo de los frutos en toda el área mediterránea, donde se adaptó muy bien a las zonas de cultivo de cítricos.