EUROPA PRESS
MADRID, 24 Sep. (EPTURISMO) -
'La Isla Bonita', 'La Isla Verde' o 'La Isla Corazón'. La isla canaria de La Palma puede recibir muchos nombres, pero este paraíso volcánico sigue conservando paisajes únicos.
Por su clima templado, su abundante vegetación y sus aguas cristalinas, La Palma es un lugar perfecto al que viajar si no se quiere dejar atrás el verano.
La tercera isla más pequeña del archipiélago español del Atlántico está considerada como Reserva Mundial de la Biosfera y ofrece a sus visitantes múltiples posibilidades para encontrarse y disfrutar con la naturaleza más salvaje.
La Palma es Reserva Mundial de la Biosfera
Por su origen volcánico, las playas de la isla tienen una belleza singular. Entre la costa acantilada se pueden encontrar pequeñas calas de arena fina y negra que, bañadas por el Atlántico, destacan por su limpieza y gran variedad de fauna marina.
Amanda Díaz
Puerto Naos, Puerto de Tazacorte, Charco Verde o la de los Cancajos, son solo algunas playas palmeras que merece la pena visitar. La del Puerto de Tazacorte está considerada como una de las mejores de la isla. Situada en una zona urbana y con bandera azul, es un lugar perfecto para tomar el baño una vez pasado el verano, pero además, también es un enclave ideal para practicar deportes acuáticos como el kayak.
Cancajos destaca por su vida submarina
Charco Verde es la cala más recomendable si se viaja en familia ya que cuenta con accesos adaptados para carritos de bebé y servicios de socorrismo. Por su parte, las playas de Cancajos, en la localidad de Breña Baja son un lugar perfecto para practicar buceo o disfrutar de un bautismo, ya que destacan por su gran vida submarina.
Si lo que se quiere es desaparecer, la playa de Nogales es un lugar más apropiado. Nogales tiene todo lo que ofrece La Palma: montañas, arena volcánica y el contacto directo con el Atlántico.
Amanda Díaz
PISCINAS EN EL MAR
Pero además de las numerosas calas --no todas pueden enumerarse aquí--, en 'La Isla Corazón' también se puede disfrutar de piscinas naturales.
Las de Charco Azul son unas de las más importantes ya que están consideradas como las mejores de España y además, son un lugar perfecto para tomar el baño durante todo el año.
CALDERA DE TABURIENTE
Los contrastes son uno de los principales encantos de esta isla mágica. La abundante vegetación del parque nacional de la Caldera de Taburiente es algo que merece, sin duda, la pena contemplar.
La naturaleza volcánica del terreno y el tiempo han sido los encargados de dar forma a esta enorme caldera de 2.000 metros cuadrados que se presenta atravesada por riachuelos y enmarcada por un espectacular monte escarpado de ocho kilómetros de diámetro.
La flora y fauna de Taburiente sique sin cuantificarse
Taburiente cuenta con una gran variedad flora y fauna que todavía sigue sin cuantificarse. Entre la fauna destacan las escolonpedras, más conocidas como cienpiés, que pueden alcanzar aquí el tamaño de un palmo y las arañas lobo, una variedad de lo comúnmente conocido como tarántula.
Amanda Díaz
Amanda Díaz
En la zona más baja, en una cueva, vive el escarabajo cavernícola, un tipo de escarabajo endémico de la isla caracterizado por haber perdido los ojos y la pigmentación de la piel.
Una buena opción para descubrir las peculiaridades de este parque es realizar una ruta a pie. Las empresas turísticas de La Palma organizan algunas excursiones que se pueden realizar también por libre y en las que dependiendo de la dificultad que se desee alcanzar, los visitantes se pueden adentrar más o menos a las sus zonas más recónditas y vírgenes.
UNA ISLA CON EL CORAZÓN EN LAS ESTRELLAS
Red Bull
Van Marty
En el término municipal de Villa Garafia, y justo al lado del parque de Taburiente se ubica El Observatorio del Roque de los Muchachos, a 2.396 metros de altitud, que alberga en su interior una de las baterías de telescopios más completas del mundo dedicado a la observación nocturna y a la física solar.
Pero este observatorio no está aquí por casualidad. Cerca de él está el mirador que recibe el mismo nombre. Este es un lugar único en el mundo en el que la poca contaminación --según algunas investigaciones La Palma cuenta con el cielo más limpio del mundo-- y la altura permiten observar de noche un gran espectáculo estelar y de día, la física solar.
El cielo de La Palma es el más limpio del mundo
Además, desde este mirador se pueden observar las vistas del parque de Taburiente y, si la meteorología lo permite, en los días claros también se puede dislumbrar la silueta de las demás islas de la provincia tinerfeña: El Hierro, Tenerife y La Gomera.
El Roque de los Muchachos es un lugar excepcional para pasear por el 'techo' del pargue, pero también es un enclave perfecto para que los amantes de la fotografía den rienda suelta a su imaginación y disfruten fotografiando un paisaje inigualable y para muchos, difícil de olvidar.
