BARCELONA, 19 Sep. (EUROPA PRESS) -
El concejal de Turismo de Barcelona, Agustí Colom, ha pedido a los grupos municipales que eviten la palabra 'turismofobia' para referirse a protestas contra actividades turísticas, después de que Arran haya protagonizado este verano ataques a un bus turístico y a bicicletas de alquiler.
"Si realmente se quiere proteger al sector no deberíamos utilizar el término 'turismofobia", ha asegurado este martes en la Comisión de Economía, y ha insistido en que lo peor que se puede hacer para la imagen de la ciudad es seguir propagando la idea de que hay turismofobia.
Colom ha aceptado que Barcelona "tiene problemas de congestión turística", pero ha asegurado que el Gobierno municipal trabaja para que el sector turístico aporte lo mejor de sí a la ciudad y redistribuya mejor sus beneficios entre todos los ciudadanos, y ha añadido que se está dando un salto cualitativo en esta materia.
La líder de Cs, Carina Mejías, ha afirmado que, si Barcelona quiere continuar como un referente turístico, debe actuar con firmeza antes los ataques y estar al lado del sector, y la concejal de Demòcrata Sònia Recasens ha criticado a BComú por usar el discurso de la 'turismofobia' para lograr votos.
Alfred Bosch (ERC) ha dicho: "Si acabamos dando la imagen de que Barcelona es una ciudad turismofóbica al final la gente lo acabará creyendo"; el popular Javier Mulleras ha lamentado que sí existe una campaña contra los turistas en la ciudad, y el concejal no adscrito Gerard Ardanuy ha pedido caminar hacia un modelo turístico más compartido.
Para la concejal de la CUP Eulàlia Reguant, la turismofobia no existe: "Se lo han inventado para tapar las vergüenzas del modelo económico del monocultivo turístico", y ha rechazado un modelo de masificación que destruye barrios y expulsa a los vecinos.
