Los visitantes extranjeros gastaron 5.200 millones en las tiendas británicas
MADRID, 28 Feb. (EUROPA PRESS) -
El 61% de los españoles que viaja a Reino Unido está dispuesto a realizar compras en territorio británico, una propensión al consumo mayor al de la mayoría de turistas, solo superada por los viajeros australianos (76%) y suecos (63%), según un estudio realizado por VisitBritain.
No obstante, los BRIC (Brasil, Rusia, India y China) también ocupan un lugar destacado en la propensión a comprar, con un 73%, en el caso de los brasileños, seguidos de los rusos (68%) y los chinos (65%), mientras que los indios están cerca de la media, ya que un 58% de ellos tienden a ir de compras.
De los 18 millones de visitantes que recibe el país, los franceses son los compradores más prolíficos, con más de dos millones de viajes, seguidos de cerca por los alemanes y los estadounidenses (1,63 millones, respectivamente) y los irlandeses (1,1 millones).
Por su parte, los españoles realizan 1,1 millones de viajes, por delante de los turistas holandeses, australianos, italianos, belgas y suecos, siendo las tiendas y los mercados londinenses de categoría mundial una importante atracción para los visitantes extranjeros.
De hecho, el informe apunta que cerca del 81% de los visitantes en vacaciones que visitaron Londres fueron de compras, un beneficio notable para la región que acapara entre dos tercios y tres cuartas partes de los visitantes en vacaciones que compran en todo Reino Unido.
Además, remarca que los visitantes extranjeros se gastaron 5.200 millones de euros en las tiendas británicas, lo que significa que realizan el 25% de todos sus gastos en las tiendas del país, a la vez que revela que la mayoría del gasto se hizo en ropa, unos 2.650 millones de euros.
También insiste en que un turista de compras gasta más que un turistas extranjero al uso, con una media de 785 euros de gasto por viaje del primero, frente a los 670 euros del segundo.
Entre las actividades principales en el país, casi uno de cada cinco visitantes apuntó que iría de compras a Harrods, seguida de otras como la visita a los lugares en los que se rodó Harry Potter o ir al teatro.
