BRUSELAS, 20 Ago. (EUROPA PRESS) -
La empresa española IDPSA de ingeniería y robótica y la Fundación Prodintec participa en un proyecto coordinado por un ingeniero español que pretende incorporar la robótica en la construcción de aeronaves y al que la Unión Europea ha contribuido a financiar con 3,7 millones de euros.
"Si logramos resolver los complicadísimos obstáculos técnicos que impiden la utilización generalizada de robots en la producción, podremos liberar a las personas para que trabajen en las tareas de mayor valor añadido", ha explicado el ingeniero y coordinador del proyecto que lidera el Instituto Fraunhofer de explotación industrial y automatización alemán, José Sáenz, con socios de España, Alemania y Austria.
Los investigadores del proyecto, bautizado VALERI, están trabajando en los llamados "manipuladores móviles" capaces de acceder a espacios reducidos y trabajar en tareas similares en emplazamientos múltiples, algo que evitaría dificultades cotidianas propias del sector de la construcción aeronáutica como las lesiones lumbares por las tareas muy repetitivas y los espacios angostos en los que operan.
El prototipo de laboratorio que están construyendo se someterá a ensayo en una fábrica de aquí a 2015. "Queremos fabricar unos robots que trabajen junto a los seres humanos, que hagan lo que estos no quieren hacer y les permitan dedicarse a labores más intelectuales", ha explicado Sáenz, que ha asegurado que "nadie va a perder su puesto de trabajo de repente" por los robots dado que gracias a éstos "la experiencia y los conocimientos técnicos" de las personas "podrán valorarse más".
La Comisión Europea ha destinado 3,7 millones de euros para el proyecto, que también recibe aportaciones directas de Airbus y la empresa austriaca FACC, dos de los socios del proyecto, en el que también participan las alemanas KUKA laboratorios y Profactor.