MADRID, 20 Nov. (EUROPA PRESS) -
Renfe ha lanzado oficialmente el concurso público para contratar el suministro y mantenimiento de treinta nuevos trenes AVE, un pedido estimado en 2.642 millones de euros, con la apertura del plazo para que las empresas interesadas en pujar por el contrato remitan a la operadoras sus respectivas solicitudes de participación.
Una vez que la compañía ferroviaria verifique que las empresas que hayan pedido participar en el proceso cumplen los requisitos básicos requeridos, procederá a abrir un plazo para que presenten sus ofertas. El objetivo de la operadora es adjudicar el contrato en mayo de 2016.
En virtud de los pliegos del contrato, Renfe otorgará ochenta puntos a la propuesta técnica que realicen la distintas empresas, esto es, al tren con que opten al concurso. Los veinte puntos restantes se darán a la oferta económica.
En cuanto a la parte técnica, la operadora dará cincuenta puntos (el grueso de la puntuación total), a las empresas que acrediten haber realizado trabajos de fabricación y suministro de trenes AVE, capaces de circular a una velocidad de, al menos, 250 kilómetros por hora "en el ámbito de la Unión Europea".
De esta forma, no podrán optar al contrato los fabricantes de trenes que no hayan realizados proyectos en Europa, entre ellos los de origen asiático, tal como avanza el diario 'Expansión' en su edición de este viernes.
No obstante, a pesar de que Renfe pretende encomendar el contrato a una sola oferta, la compañía da la posibilidad de que dos o más fabricantes se presenten juntos a través de consorcios.
Los pliegos establecen que el tren a suministrar debe ser capaz de circular a una velocidad "igual o superior a 320 kilómetros por hora" y contar con capacidad para 400 viajeros.
En cuanto al criterio de adjudicación, Renfe encomendará el 'macropedido' a "la oferta económicamente más ventajosa teniendo en cuenta los criterios que figuren en el pliego de condiciones", según reza en el pliego de licitación del pedido.
CONTRATO DE LA DÉCADA.
El contrato de trenes de Renfe, el primero que lanza la compañía ferroviaria en la última década, contempla el suministro y el posterior mantenimiento durante un periodo máximo de 40 años de treinta nuevos AVEs.
En concreto, el pedido contempla un primer suministro de forma inmediata de 15 trenes AVE, y la opción de solicitar otros quince trenes más, en lotes de cinco, en función de las necesidades de la compañía. Estos últimos trenes podrán ser de rodadura desplazable.
El calendario fijado por Renfe para el contrato establece que el adjudicatario del contrato debe suministrar las primeras unidades de los nuevos AVE en el año 2018.
