Cree que "BComú ha escogido reforzar el frentismo" optando por un acuerdo con los socialistas
BARCELONA, 15 (EUROPA PRESS)
El candidato republicano a la Alcaldía de Barcelona, Ernest Maragall, ha avisado este sábado de que descarta "absolutamente que ERC quede convertida en muleta" de un ejecutivo municipal de BComú y su candidata, Ada Colau, y el PSC, que se articulará previsiblemente si Colau vuelve a ser investida alcaldesa la tarde de este sábado, como está previsto.
Sobre que Colau asegure que priorizará el apoyo también de ERC para promover proyectos, Maragall ha replicado: "¿Encima este paquete incluye la obligación de ser aliados? ¿También incluye docilidad y silencio? Seremos aliados del progresismo y de los derechos y libertades. Es nuestra única alianza hoy", ha dicho en una entrevista de 'Tot Barcelona' recogida por Europa Press.
Maragall ha sostenido, ante el apoyo previsto de al menos tres ediles de BCN Canvi-Cs, liderado por Manuel Valls, que "a los poderes económicos les preocupa mucho menos una izquierda de mucho gesto y poca acción real transformadora que un reto de profundidad para el régimen del 78, como es la emancipación de Catalunya".
"Con el refuerzo defensivo del unionismo y este éxito aparente de evitar la llegada del independentismo a la ciudad, están ayudando a la inestabilidad y a la incertidumbre", porque se refuerza el frentismo en lugar del diálogo que cree que hubiera promovido un ejecutivo que aunara a una fuerza independentista con otra que no lo es, como BComú.
BComú "ha escogido reforzar el frentismo, y es su derecho y también su responsabilidad", ha aseverado Maragall, que ha reconocido que la noche electoral no se planteó que fuera posible que se quedara sin la Alcaldía por el apoyo de Valls a Colau, ya que eran conscientes de la aritmética, pero no de que esta suma política fuera posible.
Preguntado por si quiere una respuesta de país, como dijo la portavoz del Govern, Meritxell Budó, ha respondido: "No, yo quiero una afirmación de la ciudad. Sería una reacción legítima y comprensible ante una situación de difícil comprensión", pero ha pedido no permitir ser arrastrados por el frentismo.
CUATRO AÑOS EN LA OPOSICIÓN
Sobre si se ve cuatro años en la oposición, ha sido claro: "Sí, sí, francamente", aunque ha resaltado que en cuatro años puede pasar de todo, como cambios en la situación dentro del previsto ejecutivo de comuns y socialistas, y ha dicho que la primera prueba será la sentencia del juicio del 1-O.
Preguntado por si los partidos independentistas deberían haberse presentado juntos en Barcelona, ha señalado que el problema no ha sido concurrir separados sino que lo hiciera "una lista pequeña pero que ha hecho mucho daño", en referencia a la de Barcelona És Capital-Primàries, sin la que ERC y JxCat hubieran tenido más ediles y la CUP hubiera entrado, según él.
