Las mujeres con trastornos de la placenta tienen un mayor riesgo de enfermedad cardiovascular, según estudio

Actualizado: viernes, 18 noviembre 2005 15:42


MADRID, 18 Nov. (EUROPA PRESS) -

Las mujeres que tienen un trastorno placentario durante el embarazo tienen un mayor riesgo de enfermedad cardiovascular prematura que aquellas que no padecen esta afección, según un estudio de la Universidad de Toronto (Canadá) que se publica esta semana en la revista 'The Lancet'. Las mujeres afectadas deberían evaluar su presión sanguínea, peso o perímetro de la cintura cada seis meses después de dar a luz y regirse por un estilo de vida saludable.

Los expertos explican que los síndromes de placenta materna, incluyendo la preeclampsia, la hipertensión durante el embarazo y condiciones en las que los vasos sanguíneos de la placenta se bloquean. Probablemente los factores de riesgo maternal de los síndromes de placenta, obesidad, resistencia a la insulina, hipertensión y altos niveles de lípidos en sangre, son también predictores independientes del inicio adulto de la enfermedad cardiovascular.

En este estudio, los científicos evaluaron el riesgo de enfermedad cardiovascular prematura en relación a los trastornos placentarios. Los investigadores reclutaron a un millón de mujeres de Ontario (Canadá) que no tenían enfermedad cardiovascular antes de su embarazo. De ellas, 75.000 fueron diagnosticadas con un trastorno placentario. Los investigadores siguieron a las participantes por un periodo medio de 9 años después de dar a luz y registraron la presencia de enfermedad cardiovascular.

Descubrieron que las mujeres que tenían trastorno placentario tuvieron el doble de riesgo de enfermedad cardiovascular prematura. El riesgo fue mayor si el bebé de la mujer tenía un crecimiento restringido o murió en el útero, o si la mujer tenía factores de riesgo preexistentes de enfermedad cardiovascular, como el tabaquismo. Los autores señalan que los descubrimientos no implican una relación causal entre los trastornos de placenta maternal en el embarazo y futura enfermedad cardiovascular.