VALENCIA, 14 Oct. (EUROPA PRESS) -
El secretario general del PSPV, Jorge Alarte, aseguró este miércoles que siente "miedo" ante la posibilidad de que la secretaria general del PP, María Dolores de Cospedal, "vaya a mandar a partir de ahora" en la Comunitat y exigió al presidente de los 'populares', Mariano Rajoy, que "asuma responsabilidades" y destituya también al presidente de la Generalitat, Francisco Camps, al igual que ha hecho con el ex secretario general del PPCV, Ricardo Costa.
Durante una rueda de prensa para analizar la situación política de la Comunitat, Alarte indicó que si Rajoy "ha impuesto la renuncia de Costa por ser íntimo amigo de Álvaro Pérez, por contratar con Orange Market, por haber mentido y por no haber pagado sus trajes, el presidente Camps hizo algo peor: todo eso y, según Costa, ordenarle a él que lo hiciera".
En opinión de Alarte, el presidente de la Generalitat "miente a todos y es una persona desleal con todos: con lo valencianos, con sus más estrechos colaboradores e, incluso, con el presidente que lo puso a dedo hace unos años". Por ello, el líder socialista consideró que Camps es "incapaz de hacer frente a la crisis económica y a la corrupción generalizada de su gobierno y su partido".
Camps "no es un líder", subrayó el secretario general del PSPV, quien afirmó que ante la "profunda e irreversible crisis del PP", el Gobierno valenciano "no puede continuar dirigiendo los destinos de la Comunitat". Ante esta situación, exigió la "inmediata dimisión y retirada de la vida pública" de Camps y la convocatoria de elecciones anticipadas.
Por ello, pidió a Rajoy "responsabilidades políticas inmediatas y le transmitió que siente "miedo" ante la posibilidad que De Cospedal "vaya a mandar a partir de ahora en la Comunitat". "No vamos a tolerar que la señora De Cospedal mande en nuestra tierra", esgrimió Alarte.
"Que Rajoy tome las decisiones que tenga que tomar pero que sean ya y que deje de actuar en función de sus intereses y de tapar las vergüenzas de su partido, sumido en un vendaval de corrupción, sospechas, traiciones, mentiras y deslealtades, que poco se asemejan a un partido democrático", lamentó.
"El muro del PP se ha quebrado", destacó el jefe de los socialistas valencianos, quien dijo sentir "bochorno y vergüenza" ante el "espectáculo que el PP ha dado en las últimas horas". "Camps ha engañado a todo el mundo: a los valencianos ya hace años, pero además ahora ha decidido engañar deliberadamente a Rajoy, a Costa y ha sumido al PP en un situación de crisis de liderazgo", recalcó.
Explicó que siente "dudas" sobre la "honorabilidad" de quienes componen el Gobierno valenciano, especialmente del presidente de la Generalitat, por lo que lamentó "la degradación absoluta de la vida democrática y el control hasta la extenuación, como instrumento de mera propaganda, de la televisión pública". "El Gobierno de la Generalitat no puede continuar dirigiendo los destinos de nuestras instituciones", aseveró Alarte.
Asimismo, lamentó que se hayan gastado "millones de euros encargados a Orange Market para fabricar un líder, el señor Camps, que no existe", ya que, en su opinión, el presidente de la Generalitat es "incapaz" de hacer frente a la "corrupción de su gobierno y a la crisis de su partido", apuntó.
"NO SE SABE NADA DE LOS PRESUPUESTOS"
En paralelo, el secretario general de los socialistas valencianos criticó que "no se sabe nada de los presupuestos de la Generalitat y el plazo se acaba el 31 de octubre". "Nadie está preparando unos presupuestos para salir de la crisis económica, nadie está gobernando esta comunidad autónoma", mencionó Alarte, quien, ante este hecho, insistó en la "urgencia" de convocar elecciones autonómicas.
Sobre si los cambios efectuados en el grupo parlamentario popular afectarán a las elección de la secretaria de Organización del PSOE, Leire Pajín, como senadora territorial, Alarte dijo que "Costa ayer dijo que obedecía órdenes, que aquí todo lo decidía el presidente, que él nunca coordinó ninguna campaña y alguna que otra lindez a algún compañero suyo", apuntó Alarte, quien agregó que Costa fue un "convencido, apasionado, devoto y, además, muy afanado" en el cumplimiento de órdenes. "Pero al final nuestro problema no es Costa o Maluenda, el problema de alterar la composición de manera antidemocrática del Senado de España es de Camps", concluyó.
