LOGROÑO, 14 Jul. (EUROPA PRESS) -
Lucía Grávalos, joven exponente de la cocina riojana, gran embajadora de su tierra, ha vuelto a su ciudad natal, Calahorra, para dar vida a su propio proyecto: un gastronómico que verá la luz dentro de poco donde se podrán encontrar sus conocidos platos, como la acelga de la yaya, el ramen y marmitako riojano, el cromatismo verde de la huerta o su Oído Cocina, ganador del Delantal de Oro en 2017.
Será el centro neurálgico de sus obras gastronómicas donde dar rienda suelta a su talento y expresar su pasión por la cocina a través de sus creaciones culinarias. Siempre buscando la excelencia sin perder la esencia ni la perspectiva.
A la vez, durante el confinamiento ha abierto también en Calahorra una visión canalla de su cocina en forma de delivery: 'Mentica By Lu', una propuesta gastronómica informal con productos de gran calidad ofrecidos en servicio a domicilio: hamburguesas gourmet, snacks, hot dogs y postres elaborados con ingredientes de proveedores de pequeños comercios y productores de la zona.
Lucía Grávalos se ha formado entre fogones con estrella, aprendiendo de grandes maestros como Martín Berasategui, Dani García y Álvaro Salazar. Su trayectoria profesional reúne experiencias vividas trabajando en restaurantes de Lasarte, Mallorca, Málaga, Logroño y Calahorra. Su experiencia, muy ligada a la costa y a la pastelería, marca su know-how y conocimientos que, unidos a su imaginación y talento, plasma en sus creaciones.
Apuesta por la huerta riojana, el producto mimado y de calidad, el respeto por la materia prima y la ilusión por crear y descubrir nuevos y sorprendentes sabores. Experimenta, disfruta trabajando, utilizando nuevas técnicas que le permitan extraer todo el potencial de los elementos que conforman sus platos para que eclosionen llenando de sensaciones el paladar y el recuerdo: "El sabor que busco tiene que ver con la elegancia, con la sutileza y con la persistencia. Cuando encuentras algo que tiene el don de inundar la boca, llenarla y dejar un recuerdo por textura, aroma y gusto, es algo realmente inenarrable."
Sus creaciones se mueven entre lo divertido, lo serio y lo sostenible. Su cocina es atrevida, sabrosa, sincera, alternativa, con toques exóticos y vanguardista, siempre enfocada en la tierra. Sus platos son reflejo de su personalidad: coloridos, diferentes, transgresores, pero fieles a su origen.
Concienciada del impacto que tiene su trabajo en el medio ambiente y la responsabilidad que tiene como cocinera, está en permanente búsqueda de nuevas opciones que permitan crear una cocina más sostenible y amigable con el ecosistema.
El vino, emblema de La Rioja, estará también muy presente en el nuevo local: "Tenemos que ser conscientes de lo que supone para nuestra gastronomía y el valor que se le da en los restaurantes. Puedes cocinar con él, pensar en él, evocarlo, combinarlo, maridarlo... Tiene infinidad de resortes en la cocina y muchas posibilidades."
Embajadora de la cocina riojana, ha participado en varios encuentros gastronómicos y maridajes especiales organizados en restaurantes de toda España, llevando sus platos, basados sobre todo en la huerta riojana y en la cocina más tradicional de nuestra tierra por todo el territorio nacional.
Con su cocina busca evocar al recuerdo, tanto de su pasado, olores de su niñez, sabores de su infancia* como para conseguir que siempre se mantenga viva la emoción que generan sus creaciones después de probarlas. Busca el sabor y su persistencia en la boca y en los recuerdos.
Lucía da valor a los productos de la tierra y a la gastronomía consiguiendo una fusión entre la modernidad de una cocina fresca y nueva de sabores sorprendentes con la tradición, muy arraigada a las ollas de su abuela. Quiere transmitir su positividad y amor por la tierra a través de su arte. Y conseguir que quien pruebe sus platos se lleve una gran sensación y viva una experiencia culinaria que reviva cada vez que la recuerde
