Imagen de Vitoria Gasteiz - TURISMO DE VITORIA GASTEIZ
MADRID, 27 May. (EUROPA PRESS) -
La mayor de las tres provincias de Euskadi ofrece a lo largo de sus 3.037 kilómetros cuadrados un sinfín de atractivos de todo tipo para disfrutar en pareja, en familia o con amigos
El viajero puede disfrutar de un viaje al pasado paseando por la 'Almendra Medieval' de Vitoria, admirar el salto del Nervión (el más alto de España), oxigenarse en el Parque Natural de Izki, sorprenderse con el paisaje y la historia del Valle Salado de Añana, sumergirse en la cultura del vino en las bodegas y viñedos de Rioja Alavesa, o darse un chapuzón en playas de interior con bandera azul.
Y es que Álava lo tiene todo para enamorar a quien se deje tentar por ella en cualquier época del año. Estas son algunas de las propuestas para descubrir su capital y sus comarcas.
1. Vitoria-Gasteiz.
En la capital proponemos dos opciones turísticas para conocer la esencia de la ciudad: rutas temáticas por la Almendra Medieval basada en leyendas, fantasmas o el bestseller 'El silencio de la ciudad blanca'; y un paseo por el Anillo Verde donde es posible avistar aves, ciervos y otros animales entre humedales. Todo ello, de la mano de guías locales.
Vitoria-Gasteiz ha obtenido la certificación internacional Biosphere Responsable Tourism como destino turístico sostenible.
Una buena manera de conocer Vitoria-Gasteiz es hacerlo en bicicleta. De momento, la ciudad cuenta con casi un centenar de kilómetros de calles o sendas acondicionadas para el tránsito ciclista.
2. Valle de Ayala.
En el Valle de Ayala una de las opciones turísticas más buscadas es el salto del Nervión (el salto de agua más alto de España, con más de 200 metros de caída al vacío). La caída de agua se puede disfrutar desde la base del acantilado, caminando tres kilómetros desde la población o subiendo en coche al puerto de Orduña y andando desde el aparcamiento del Monte Santiago.
En cualquier caso, es una hora de paseo y de emoción al contemplar este río que, no más nacer, se precipita 270 metros, situándose entre los diez saltos más vertiginosos de Europa y los mayores del mundo.
También visitar el original Taller Museo Santxotena en Artziniega. Se puede apreciar la obra de este discípulo de Jorge de Oteiza de la mano del propio autor, lo que supone una experiencia única y diferente.
Otros imprescindibles en la zona: empaparse de cultura popular en el Museo Etnográfico de Artziniega, acercarse a la historia en el Conjunto Monumental de Quejana o degustar el rico txakoli de la comarca (vino blanco).
3. Ruta de las Iglesias pintadas de la Llanada.
Dos pequeños pueblos de esta comarca, Alaitza y Gazeo, esconden iglesias cuyo interior está decorado con pinturas medievales de origen y objeto misterioso para historiadores y expertos. Una amena visita guiada permite conocer los secretos de ambos templos.
Las pinturas datan del siglo XII y son muchos son los enigmas aun sin responder y que poco a poco van obteniendo respuesta. En ellas, se pueden observar peregrinos, caballeros y batallas, castillos e, incluso, asesinatos y partos.
Y dos propuestas adicionales para completar el plan: aprender cómo se elabora el queso Idiazábal en las queserías de la zona y, por supuesto, saborearlo; y visitar la villa medieval de Salvatierra.
Como villa histórica fortificada, Salvatierra, también llamada Agurain, mantiene parte de sus murallas. Te encantará recorrer su casco histórico repleto de casas blasonadas que cuentan historias y leyendas de tiempos antiguos. Cuenta con la particularidad de tener un fabuloso Museo de Cerámica al aire libre para recordar la tradición alfarera de la zona y, especialmente, la fabricación de azulejos de la villa.
4. Montaña Alavesa.
Álava es naturaleza en estado puro y estas son dos escapadas perfectas para conocer su biodiversidad: la vía verde del ferrocarril Vasco-Navarro (centro de interpretación en la villa medieval en la localidad de Antoñana) y el Parque Natural de Izki (red de senderos y centro BTT).
El Parque de Izki es un rincón ideal para realizar turismo ornitológico, paseos y excursiones a pie, en bicicleta o a caballo. Izki alberga la reserva de 'Quercus pirenaica' mayor de Europa y en su entorno te llamarán la atención las cuevas eremíticas de Laño, Faido y Marquínez. Merece también una visita las hoces y roquedos de Arluzea y la villa de Peñacerrada.
5. Valle Salado de Añana.
Recorrer, conocer y saborear el Valle Salado de Añana, salinas milenarias que configuran uno de los conjuntos arquitectónicos, paisajísticos, arqueológicos, geológicos e históricos más singulares del mundo.
La visita 'Valle Salado' es un recorrido ideal para quien se acerca por primera vez a las salinas. Entre los meses de abril y octubre esta visita incluye la posibilidad de disfrutar del Spa Salino al aire libre. En sus instalaciones podrás introducir los pies y las manos en las aguas hipersalinas procedentes de los manantiales.
El castillo de Portilla (Portilla) y la Ruta del Agua (Zambrana) para los amantes del senderismo también encajan en el plan a la perfección.
6. Rioja Alavesa.
Y hablar de Alava es hablar de vinos. Sumérgete en la cultura del vino en las bodegas y viñedos de Rioja Alavesa a través de visitas guiadas que te permitirán conocer la arquitectura del vino, con las obras de arquitectos como Frank Ghery o Santiago Calatrava.
Además se puede disfrutar de una comida regional entre viñedos; y asistir a una cata comentada con algunos de los mejores vinos del mundo. Pequeñas bodegas familiares o grandes edificios vanguardistas, viñedos entre los que pasear y recuperar la calma.
7. Gorbeialdea.
En Euskadi no es imprescindible acercarse al mar para disfrutar de magníficas playas. La provincia de Álava cuenta con varias playas de interior reconocidas con bandera azul por la UE por la limpieza de sus aguas y unas instalaciones adecuadas para todos los públicos.
Situada en el embalse de Ullibarri-Gamboa, en la playa de Landa se puede tomar el sol, disfrutar de un baño, practicar deportes acuáticos o, simplemente, relajarse. El Parque Provincial de Landa se encuentra al noroeste del embalse.
Quienes buscan retos no pueden dejar de subir el monte Gorbea, cumbre emblemática de Álava, y disfrutar también de unas inigualables vistas.
Tiene una altitud de 1.482 metros sobre el nivel del mar y su cima está coronada desde 1899 por una cruz metálica, de la que ha habido diferentes versiones. La actual es de 17,23 metros de altura. Es un tradicional punto de referencia del montañismo vasco y corazón del parque natural del Gorbea.
