LOS ANGELES, 11 Jul. (EUROPA PRESS) -
Se acabó el tabaco, el alcohol y la comida basura para la modelo. Su deseo por convertirse en madre cuanto antes ha hecho que la joven de perfil perfecto destierre de su vida todos vicios nocivos para su salud con la intención de quedarse embarazada en cuanto termine su luna de miel.
Kate Moss y su nuevo marido, Jamie Hince siguen disfrutando de su romántico viaje de recién casados a bordo de un lujoso yate valorado en 11 millones y medio de euros surcando las aguas del mar Mediterráneo. La palaciega nave es propiedad de jefe de Topshop, Philip Green.
La pareja, que contrajo matrimonio el pasado 1 de julio está deseando aumentar la familia lo antes posible y de hecho, a pesar de que en el banquete nupcial no se escatimó en alcohol, la modelo está dispuesta a despedirse de las bebidas espirituosas así como del tabaco.
Un amigo de la pareja comunicaba a 'Contact Music': "Kate llegó a su tope con el alcohol, el tabaco y las grasas el día de su boda pero Jamie quiere que ella adopte un estilo de vida más sano mientras intentan tener un hijo".
Aunque son muy conocidas las malas costumbres de Moss en cuanto alimentación, la modelo está dispuesta a dar un giro de 180 grados y probar una dieta mucho más sana y saludable: la mediterránea.
"Kate se ha pasado a la dieta mediterránea a base de trigo, cebada y aceite a base de pescado con vistas a quedarse embarazada en cuanto vuelva a casa" comentaba el amigo de la pareja a la web.
Habrá que esperar a ver cuándo llega la cigüeña a esta pareja que está deseando ponerse manos a la obra.
