MADRID, 7 Feb. (CHANCE) -
¿Eres de los que no puede resistirse a meterse un trozo de chocolate en la boca y que se vaya derritiendo? Esa sensación es propia del chocolate Milka, la marca de Mondelez que en su nueva campaña nos descubre cual es el secreto de la cremosidad de sus productos, capaces de inundar todos nuestros sentidos.
Milka ha sustituido de forma temporal de sus envoltorios a sus icónicas vacas lila por imágenes de vacas alpinas reales, como las que desde los valles altos de los Alpes, producen la leche para sus chocolates, y ahora ha presentado una nueva campaña con el que nos transporta a las montañas suizas para conocer a las verdaderas protagonistas de sus chocolates.
Bajo el lema 'La cremosidad tiene nombre y nuestras vacas también' Milka da el protagonismo a sus modelos de carne y hueso, que no son otras que Lola, Lotta, Katja y Marisa, cuatro vacas alpinas procedentes de pequeñas granjas familiares como las que desde hace más de 120 años proveen a Milka de leche.
¿Pero dónde está el secreto de esa cremosidad? En que pertenecen a granjas con una media solo de 60 vacas cada una, situadas en un radio de 100 kilómetros dentro de la región alpina, y que son criadas con "gran mimo por ganaderos que comparten los mismos valores que la marca". Eso queda patente, según el senior Brand manager de Milka en España, Roberto Cappato, en la calidad de los productos y en la respuesta de los consumidores.
TRUCOS PARA CATAR CHOCOLATE
Milka también nos da, en palabras del maestro chocolatero Nacho Gómez algunos trucos para descubrir esa cremosidad de la que hacen gala sus chocolates como es olerlo primero, disfrutar del sonido que hace al partirlo en porciones o masajearlo contra el paladar al tiempo que inspiramos un poco de aire y disfrutamos de su retrogusto y sus aromas, cuando aparecerán más claramente las notas de leche alpina.
Para acercar a los amantes del chocolate a la cremosidad de sus productos, la compañía ha recreado una granja elaborada con chocolate Milka, previamente atemperado con una técnica esencial para obtener unos resultados óptimos a la hora de trabajarlo y que le aporta brillo y consistencia propia, y que en el caso de Milka, le ayuda a resaltar aún más su cremosidad.
Situada en la calle General Lazy, 48 de Madrid, la granja de chocolate Milka permanecerá abierta desde este viernes y hasta el domingo 9 de febrero con el objetivo de que todo el que quiera pueda sumergirse en un mundo de chocolate.
Además, habrá talleres en los que aprender a hacer figuras con chocolate y decorarlas, así como recrear animales típicos de la granja. Todo ello, de la mano de Gómez y la influencer y repostera Alma Cupcakes.
