MADRID, 22 Abr. (CHANCE) -
Johnny Depp aterrizó el pasado fin de semana a Australia, para reanudar el rodaje de la quinta entrega de Piratas del Caribe. El actor tuvo que abandonar la grabación de la saga hace mes y medio, debido a una lesión en la mano derecha que le obligó a pasar por quirófano.
El intérprete de 51 años, que lucía un pañuelo rojo en su brazo accidentado, bajó del avión privado de la mano de su mujer, la actriz Amber Hard, con la que se casó el pasado 3 de febrero en Las Bahamas. La imagen de la pareja sonriente y agarrada de la mano acallaba así los rumores que apuntaban a una crisis sentimental.
Según el diario New York Post, Depp se habría mostrado reticente a la estrecha relación que une a su esposa con la fotógrafa Tillett Wright. La artista neoyorquina presume de la amistad que la une a la actriz de 28 años, que en el pasado se declaró abiertamente bisexual. En los mentideros de Hollywood apuntan a un triángulo amoroso, que tendría bastante enojado a Johnny.
Este regreso es una grata noticia para los seguidores de la franquicia corsaria, Dead man Tell No Tales, en la que también participa Javier Bardem. Hace pocos días CHANCE contaba la inquietud en el equipo técnico de la película por este retraso inesperado. Parte de los trabajadores se mostraron molestos porque el protagonista hubiera cobrado sus honorarios, mientras que el resto no cuando iban a regresar al trabajo.
