MADRID, 15 Oct. (CHANCE) -

En estos 15 años se han sucedido muchos grandes momentos, pero también, decepciones. Así lo atestiguaba a los medios Manu Tenorio tras la presentación del documental de El Reencuentro que se estrenará mañana domingo en La 1 (22.00 h). "Todo lo que iba a pasar era una incertidumbre, cuando se desarrollaron los acontecimientos fue impresionante porque nadie tenía ni conciencia de que eso iba a dar el pelotazo que dio. Aquello sucedió una vez y pertenece a una química muy especial", señaló el trianero a las cámaras.

Palabras pronunciadas por el mismo concursante que hace 15 años antes vivió enormes dudas sobre su participación en el espacio, ya que desde hacia tiempo trabajaba en su carrera discográfica. El sevillano empezó a cantar en grupos con apenas 17 años y era conocido en locales sevillanos, como La Carbonería. Su merecido quinto puesto en la competición y estar entre los seis finalistas le procuró ese sueño, una carrera discográfica, que se hizo realidad dos meses después de acabar el programa. Su primer disco de estudio homónimo fue un bombazo, obteniendo tres números uno, cinco Discos de Platino y 500.000 copias vendidas en España.

Manu cuenta con seis álbumes más. Aunque ninguno obtuvo los registros del primero, Tenorio fue perfilando su estilo y su lugar en el mundo de la música. En 2003 grabó su segundo trabajo, Blanco Añil, en Miami, con muchos toques románticos y baladas, un género en el que el artista se siente muy cómodo. Entenderás es su proyecto más genuino, compuesto íntegramente por él mismo y grabado en Milán bajo la producción de Bob Benozzo. Dos años después llegó Tres palabras, su disco debut con Universal Music, y dos más tarde La ley de la atracción. En los últimos seis años ha trabajo bajo tres casas discográficas distintas, EMI Music (En primera persona), Altafonte (Con el alma encendida) y PSM Show and Music (Hoy he vuelto a recordar y Presentí).

Quince años en los que ha crecido como artista y como persona. OT supuso una oportunidad en 2001, y pocos años más tarde pasó por su vida Silvia Casas para quedarse. La periodista y la estrella musical se convirtieron en una de las parejas más guapas del momento y no había photocall o evento que no deseara a los tortolitos paseando por su alfombra engalanada. En octubre de 2008 contrajeron matrimonio en Madrid y abandonaron por unos minutos el banquete para atender a la prensa apostada en El Campillo de El Escorial. Muchos aseguran que la celebración fue un suculento negocio para el matrimonio, que vendió la exclusiva por 300.000 euros.

Como todo en la vida, nada es perfecto e idílico. En noviembre de 2013, la pareja atravesó un dura crisis tras el nacimiento de su primer hijo, Pedro. Una revista publicó unas comprometedoras imágenes de Manu besándose con una azafata de vuelo llamada Ángela Lago con la que se la relacionaba desde la primavera. No obstante, el matrimonio salió adelante y a principios de 2014 llevaron a cabo varias apariciones conjuntas para acallar a aquellos que daban su amor por finiquitado.

En el concierto, le veremos cantar de nuevo con Nuria Fergó aquel Noches de bohemia que emocionó a la audiencia de OT. Tampoco faltarán Lucía, a dúo con David Bisbal, y Tu piel, con él solo en el escenario del Palau Sant Jordi de Barcelona. "Un concierto solo va a saber a poco", decía el andaluz a la web de TVE. "Nos emociona que después de 15 años haya gente que nos sigan con la misa ilusión que el primer día, empujando nuestros proyectos, dándote muchos ánimos", añadió. Hay muchas cosas de las que me arrepiento, que se podrían haber hecho mejor. Pero si después de 15 años he logrado vivir de la música, eso quiere decir que el balance es positivo", señaló el compositor.

Y como aquí el que no corre vuela, Manu ha aprovechado todo el revuelo de El Reencuentro para lanzar su dueto con María Toledo, Presentí, un tema con raíces flamencas de su último trabajo discográfico cuyo videoclip se ha rodado en un hotel de Lanzarote. "Cuando te viene una buena racha hay que aprovecharla y seguir creciendo como artista", decía el sevillano. Lo dicho...