LOS ANGELES, 9 Sep. (EUROPA PRESS) -
Uno de los mitos sexuales para los adolescentes en los años 90 ha pasado a ser de deseada a acosadora. El ex guardaespaldas de Britney Spears, Fernando Flores, ha demandado a la cantante por acosarle sexualmente mientras trabajaba, después de que en mayo Flores también le acusase de malos tratos a sus hijos, algo por lo que fue investigada en junio.
El miércoles pasado Fernando Flores presentaba una demanda por acoso sexual en la Corte Superior de Los Angeles. Los hechos en lo que se fundamenta Flores van desde pasearse desnuda o practicar sexo delante de él hasta maltratar a sus hijos.
Según el antiguo empleado de la cantante, que comenzó a trabajar para Spears en febrero de 2010, la artista hizo repetidas insinuaciones sexuales, se paseaba vestida tan sólo con un camisón transparente y "se involucró en numerosos actos sexuales frente a él".
"Llevaba un vestido de encaje blanco y transparente. Caminaba muy cerca (de Flores) e intencionalmente dejó caer su cigarrillo encendido en el suelo, se agachó para recogerlo y expuso sus desnudos genitales. El incidente le causó un shock y un disgusto", explican los papeles del abogado de Fernando.
El antiguo guardaespaldas también alega que Spears una vez lo hizo llegar hasta su cuarto, donde ella estaba de pie y desnuda, y le pidió que le llevase dos refrescos cuando Flores le preguntó si necesitaba alguna cosa. Incluso haciendo referencia a aquel cuarto, el ex empleado, de 29 años, insiste en que Britney "se mostraba en numerosos actos sexuales frente a él".
Pero las acusaciones van más allá del propio acoso sexual, ya que involucran a los hijos de la cantante en ellos. Según la demanda de Flores, la cantante de 'Toxic' estaba "manteniendo relaciones sexuales" haciendo mucho ruido en un hotel donde sus hijos se encontraban. El informe no especifica si los hijos de la cantante estuvieron presentes en algún momento para presenciarlo.
Además, el antiguo guardia de seguridad se mantiene firme a la hora de acusar a Spears de mala madre. Insiste en que en una ocasión, Britney "agredió salvajemente" a su hijo Preston con el cinturón del empleado y que en otra ocasión la cantante obligó a sus hijos a comer carne de cangrejo, aunque ellos eran alérgicos al marisco. En la demanda, Fernando explica que los dos niños comenzaron a vomitar y que la artista evitó que nadie pidiese ayuda médica alegando "¡meteos en vuestros asuntos!".
Pero Britney no es la única implicada en la demanda. Fernando también acusa a sus compañeros de seguridad por ignorarle o burlarse de sus quejas respecto al acoso de Spears. Ahora pretende ir a juicio y ser indemnizado con una cantidad económica (que no ha determinado) debido a los daños y angustia emocional que le han supuesto los presuntos acosos de la cantante.
