Andrea y Pierre Casiraghi disfrutan del verano en alta mar junto a sus parejas y amigos

MADRID, 25 Jul. (CHANCE) -

El Pacha III ya se ha convertido en el escenario de las tradicionales vacaciones de la familia Casiraghi. El espectacular velero que Stefano Casiraghi regalara a su mujer, la princesa Carolina de Mónaco, acoge desde hace unos días a los hermanos Andrea y Pierre y a sus respectivas parejas, Tatiana Santo Domingo y Beatrice Borromeo.

Ambas parejas se encuentran inmersas en un idílico crucero por las costas francesa e italiana, acompañadas por un grupo de amigos. Tal y como se puede apreciar en las fotos publicadas por la revista 'Semana', la comitiva vive unos maravillosos días de relax y diversión, haciendo escala en los enclaves más exclusivos que encuentra a su paso: la Costa Azul, Portofino, la isla de Giglio...

Andrea y Tatiana, ambos de 29 años, se muestran pletóricos en compañía de su hijo Sacha, de apenas cuatro meses. El primer nieto de la princesa de Mónaco está siendo el verdadero protagonista de las vacaciones, acaparando todas las atenciones de sus padres, quienes en breve podrían tener planes de boda, tal y como afirmó la propia Carolina el pasado verano, aunque todavía no hay fecha para el enlace.

Carlota y su pareja Gad han sido los únicos ausentes en esta travesía, ya que al parecer Carlota, presumiblemente embarazada a falta de confirmación oficial, querría llevar su primera gestación en un ambiente algo más tranquilo que el que se vive en el festivo y bullicioso barco.

Los que no han dudado en dejarse ver han sido Pierre y Beatrice, quienes en su quinto año de relación parecen estar más enamorados que el primer día. La pareja hizo gala de continuas muestras de cariño tanto en cubierta como en tierra firme. También bajaron del barco para practicar juntos "paddle-surf", el deporte de moda entre las celebrities. Pierre y Beatrice acudieron hace unos días a Isola Bella del Lago Maggiore, al bautizo de Vita Elkann, hija de John Elkann -presidente de FIAT- y Lavinia Borromeo, hermana de Beatrice. Tras la celebración, la pareja regresó al Pacha III para seguir con sus vacaciones.