MADRID, 12 Dic. (CHANCE) -
El Bar Mosky ha sido el escenario elegido por Belén Esteban para celebrar con los suyos los cien mil ejemplares vendidos de su libro de memorias 'Ambiciones y Reflexiones'. Arropada por el autor, Boris Izaguirre y su representante, Toño Sanchís, apareció luciendo su mejor sonrisa ante los medios.
'Ambiciones y reflexiones', es el nuevo libro de Belén Esteban, que incluso sin haberse presentado ya contaba con la tercera edición. Se trata de un manuscrito que ha sido protegido bajo secreto casi sumarial por su editorial, Espasa y por el autor de las entrevistas de las que se nutre el libro, Boris Izaguirre.
Por primera vez Belén Esteban deja a un lado los eufemismos (en los platós hablaba de sus adicciones) y se atreve a utilizar frases claras como: "Hubo un tiempo en que solo pensaba si mañana tendría para ponerme. En este mundo hay mucha droga, te la ofrecen por todos lados".
Por supuesto tanto Jesulín como Fran, su ex marido, ocupan importantes páginas en este libro. Cuando Belén escribe sobre lo sincera que es y la verdad que emana, reconoce que lo único que le ha hecho mentir ha sido su relación con Fran, su ex marido camarero. Respecto a Jesulín, abundan los reproches como los que lleva años profiriendo desde la pantalla de Sálvame.
Belén Esteban ha vuelto renovada a la televisión tras un largo periodo de descanso y recuperación. En su vuelta, la colaboradora de 'Sálvame' y 'Sálvame deluxe' se ha encontrado con una de las etapas más exitosas de su vida, al menos en cuanto a méritos profesionales se refiere. La de San Blas se ha colado entre la lista de libros más vendidos y ya ha alcanzado su séptima edición tres semanas después de que saliese a la venta. El número de ejemplares vendidos hasta la fecha ya supera las 100.000 unidades.
El lugar elegido para tan magna celebración fue el Bar Mosky, uno de sus preferidos por pertenecer a unos de sus mejores amigos. Casualmente fue allí donde celebró su cuarenta cumpleaños. Ataviada con un vestido ceñido de color rojo y acompañada por el autor del libro, Boris Izaguirre y su representante, Toño Sanchís, apareció luciendo su mejor sonrisa.
"ESTOY SÚPER AGRADECIDA"
Belén Esteban apenas puede aún creerse la gran acogida que ha tenido su libro. Ya en la séptima edición, sube como la espuma entre los más vendidos, perfilándose como uno de los regalos favoritos de estas Navidades.
La colaboradora de televisión asegura sentirse "muy agradecida" a toda la gente que le ha mostrado su apoyo, sobre todo, después de la mala etapa sufrida tras sus confesadas adicciones. "Así sé que la gente me quiere, me lo han vuelto a demostrar otra vez" decía.
Asegura que este éxito forma parte de la recompensa de los duros momentos que ha tenido que vivir en esta última etapa de su vida: "ha sido una terapia para mí" aseguraba.
Por su parte, su hija Andrea no ha leído el libro, tal y como su madre aseguraba "no ha leído las memorias, ha visto la dedicatoria y la foto" pues no cree que tenga edad suficiente para ello. "A mi hija se lo dejaré leer cuando crea yo conveniente y tenga una edad que lo pueda leer" afirmaba.
"SOY OTRA PERSONA"
Las memorias de Belén son profundas y sobre todo muy sinceras, escritas en "un momento que me ha valido de mucho". Toda una declaración de los aspectos más positivos, y también negativos de su vida. "Veo a la gente que se emociona mucho y eso me ayuda a mí" declaraba, y por ello, no se arrepiente de nada, aunque confiesa "hay veces que pienso 'no tendría que haber contado esto' pero me siento orgullosa de haberlo hecho".
Belén asegura que se trata de una nueva etapa en su vida y que no tiene nada que ver con la Belén del pasado. Una etapa de borrón y cuenta nueva en la que está "muy feliz", aunque para nada se plantea dejar la televisión: "si se me acaba el trabajo tendré que dedicarme a otra cosa, pero no me planteo abandonar la televisión" asegura cuando afirma que ya no hablará de su nueva vida, sólo de la pasada.
Toda su familia nota el cambio que ha experimentado, en especial, su hija Andrea, y es que su madre ahora es "otra persona" que "me levanto, pongo música, bailo, canto, estoy contenta, estoy feliz".
Eso sí, todo con la precaución de no volver a caer en la vida anterior, y es que la colaboradora de Sálvame confiesa que no ha dejado de salir de fiesta o de intentar pasárselo bien: "salgo de fiesta, pero que he salido 2 o 3 veces, también hay refrescos. No, no tengo tentaciones, estoy muy metida en lo que estoy haciendo y muy orgullosa de lo que he hecho y no quiero volver a lo de antes" aseguraba.
"TENÍA MUCHA MIERDA ALREDEDOR, PERO ESTÁ QUITADA"
Y para ayudarse a si misma con su cometido, Belén sigue acudiendo a terapia tres veces a la semana, lo que durará al menos un año más. "Tenía mucha mierda alrededor, pero esa mierda está quitada" asegura, cuando se la pregunta por las malas amistades. "Me han decepcionado los que me tenían que decepcionar, los que más cerca estaban de mí".
La colaboradora recibió hace dos fines de semana la visita de Jesulín, con la sorpresa de que no estaban en casa, algo que ella siente por su hija. "Como se presentó sin avisar, Jesús se lo perdió. A mi casa puede venir cuando quiera, pero que avise a la niña" decía, dejando claro que "las puertas de mi casa están abiertas".
De lo que no quiere hablar es de su último romance, Pedro Jesús, aunque sí que dice "estar abierta a todo" y no tener miedo a enamorarse, ahora que su corazón "está lleno de felicidad".
"A LO MEJOR AHORA SOY UNA VÍBORA EN LA CAMA"
"No me preocupo de nada, ya sé que de mi vida no tengo que hablar, hablan otros. Yo he sido muy fiel, pero ahora estoy soltera y hago lo que me da la gana" sentenciaba, insinuando que Pedro Jesús no ha sido su único idilio, ya que "también hay gente que no quiere salir".
De hecho, hay gente que ha salido diciendo que Belén es 'un juguete sexual', a lo que ella no duda en responder: "a lo mejor ahora soy una víbora en la cama".
"ME GUSTARÍA QUE LOS REYES MAGOS ME TRAJERAN UN CHULAZO"
El caso es que ahora Belén vive una etapa espléndida, lejos de errores del pasado y de momentos amargos. Con el objetivo de salir adelante y seguir así de bien con su nueva etapa, la colaboradora ha perdido 16 kg, con lo que se ve "guapísima así", aunque no quiere dejar de fumar, pues "ya se ha quitado demasiadas cosas".
Aunque bromea con que "me gustaría que los Reyes me trajeran un chulazo", al Año Nuevo le pide "que siga como estoy, que no es poco", ilusionada con las Navidades, que pasará con los que más quiere, "con mi familia y los amigos".
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