MADRID, 19 Oct. (CHANCE) -
"El regreso más esperado" así se anunciada la vuelta de Belén Esteban a la televisión. Después de seis meses alejada de los platós y las cámaras, Belén ha retomado su trabajo en Sálvame asegurando estar recuperada y rehabilitada de todas sus adicciones.
"Tenía varios problemas, era un embudo y no podía salir de él. Cuando tenía que venir a trabajar, tenía que mentir. Me metí en un pozo del que no podía salir", así narraba Belén como fueron los meses previos a tomar la decisión de abandonar la televisión por un tiempo y rehacer su vida.
Durante la entrevista, Belén habló abiertamente de sus adicciones y de como fueron sus propios jefes los que le aconsejaron el mejor especialista para solucionar ese problema. También explicó como sigue manteniendo ahora mismo el tratamiento, que a pesar de ser menos duro debe pasar diversas pruebas médicas: "Sigo un tratamiento en que cada semana me hacen análisis de todo. Belén Esteban está limpia por fuera y por dentro. He salido del túnel y no quiero entrar en ese túnel".
Su familia y su representante, Toño Sanchís, han sido los pilares fundamentales en este duro proceso. Belén estuvo muy emocionada durante varios momentos de la entrevista, sobre todo cuando agradeció el apoyo incondicional de los suyos y de los fans que le animaban a volver. Una sorpresa para la ex de Jesulín fue la llamada que realizó su madre al programa. La madre de Belén apoyó a su hija y arremetió contra María José Campanario y la madre de esta.
La nueva Belén también quiso dejar muy claro que no mantiene ninguna relación con su exmarido Fran Álvarez: "es pasado en mi vida. No me interesa nada y no quiero hablar de él. Ya no es nadie en mi vida". Estas contundentes palabras sirvieron para desmentir una posible reconciliación.
La colaboradora también aseguro que se había quitado el turbante durante sus vacaciones en Benidorm y que estaba dispuesta a encontrar de nuevo el amor.
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