MADRID, 14 Nov. (EUROPA PRESS) -
El viaje oficial del Príncipe Carlos y su esposa la Duquesa de Cornualles en Oceanía está dejando curiosas, inéditas y divertidas imágenes. Si hace tan sólo unas horas era el príncipe de Gales el protagonista de la noticia hoy lo es su esposa.
La instántanea ha sido captada en Nueva Zelanda, última escala de su viaje. Carlos y Camila visitaron el Museo de la Memoria de la Guerra de Auckland acompañados por el primer ministro, John Key y su esposa.
El príncipe Carlos vistió su uniforme de comandante en jefe de la Fuerza Aérea neozelandesa, cargo que ostenta desde hace años, mientras que Camila lució un sobrio traje de chaqueta negra con sombrero del mismo color.
A su llegada al acto y como marcan las costumbres autóctonas el presidente Key saludó a los príncipes con el tradicional saludo maorí. El beso 'hongi' que aún se preserva en la sociedad, constituye una forma de expresión singular. En este beso los labios no se tocan, se apoya la frente uno con otro para compartir pensamientos, ideas y unirse en hermandad.
Esta tradición provocó las imágenes de la jornada y aunque la duquesa de Cornualles tuvó problemas para llevar a cabo el saludo por el ala de su sombrero, logró con pericia juntar su frente y rozar la nariz con el primer ministro. Por su parte, el príncipe Carlos ejercio con soltura el tradicional saludo.
Sin duda, esta es otra de las curiosas intántaneas de este viaje oficial.
