MONACO, 4 Abr. (EUROPA PRESS) -
Ser católica es uno de los requisitos imprescindibles para acceder al trono del Principado. Por eso, Charlene Wittstock tuvo que bautizarse si quería contraer matrimonio con el Príncipe Alberto II el próximo 2 de julio.
Según un comunicado del Palacio monegasco, la prometida del Príncipe Alberto II, Charlene Wittstock se ha convertido al catolicismo, ya no existe ningún impedimento para que la joven nadadora acceda al trono.
Gracias a la admisión por elección libre y personal, tal y como señala el comunicado, la joven sudafricana de 33 años se casará con el Príncipe de 53 el próximo día 2 de julio por la Iglesia católica, en el Patio de Honor del Palacio. La novia irá de la mano de su padre desde el cuartel de los Carabineros hasta el altar.
Un día antes está previsto que se celebre el matrimonio civil en la Sala del Trono del Palacio. Tras la ceremonia se celebrará un concierto del músico francés Jean-Michel Jarre.
Los prometidos han pedido a sus invitados que no desean regalos, los futuros sucesores al trono monegasco prefieren que se hagan donativos a fundaciones y asociaciones, según ha informado Palacio.
La pareja ha comenzado hoy su primer viaje oficial como prometidos en Dublin. Tienen prevista una agenda muy repleta para los tres días que durará el viaje.
