MADRID, 27 Sep. (CHANCE) -
Concha Velasco, ilusionada, vuelve al trabajo tras su enfermedad. La actriz vuelve a subirse a un escenario en Zaragoza para actuar tras tres meses de retirada del mundo profesional por la enfermedad que sufrió tras diagnosticarle un linfoma. Ahora ya se encuentra recuperada y asegura "quiero olvidarme de todo lo que ha pasado".
Estrena 'Olivia y Eugenio' en Zaragoza. Concha vuelve al escenario protagonizando la historia de una madre y su hijo, un joven con síndrome de down al que da vida Hugo Aritmendiz, que se enfrentan a una situación extrema en la que cuestionan una serie de valores. "Me siento tan agradecida por poder volver a actuar, a pisar un escenario y a vivir otras vidas", subraya la actriz.
"Olivia ha cambiado mi manera de pensar y mi manera de sentir, ella me va a aportar más cosas a mí como persona que yo a ella como actriz", afirmó. En este sentido relata que "he tenido la suerte de que me cogiesen en el hospital muy pronto, aunque llegué tarde porque ya cuando estaba el año pasado aquí, con 'Hécuba', iba del escenario al hotel sintiéndome muy mal y no lo quería decir, pero todo eso ha pasado y ahora lo importante es Olivia y Eugenio, el estreno en Zaragoza y que el espectador que venga vea el personaje de Olivia".
CONCHA VELASCO: "AGRADEZCO EL APOYO DE MI FAMILIA, DE MIS HIJOS, SU COMPORTAMIENTO HA SIDO ESPECTACULAR"
"Hace un año leí el texto", cuando "no sabía que me iba a poner enferma y que unirían tantas cosas" a esta obra, explicó en rueda de prensa, al destacar la "suerte" que ha tenido al regresar con esta obra "que me está recordando la enorme dificultad que yo he tenido".
Gracias a esta obra, la actriz ha podido saber que se produce "un caso cada 800 partos, que seguramente es algo hereditario, genético, que no tiene que ver la edad", y comprobar cómo recibe una noticia así cualquier familia y "cómo la puede afrontar". Esas personas "se dan cuenta de que tienen un ángel de bondad, de sabiduría, un eterno niño, un ser ingenuo que está por encima de todos los demás seres de este mundo, eso cuentan Olivia y Eugenio", apuntó, para elogiar al joven que actúa con ella y tiene síndrome de down.
Destacó la "profesionalidad y amor" de Hugo Aritmendiz, un joven que "quiere ser actor" y hacer un musical tras su primera experiencia en el escenario. Así, se ha convertido "en su segunda madre, nosotros nos queremos y queremos que Olivia y Eugenio sea un espectáculo".
Respecto a los últimos meses desde que le diagnosticaran un linfoma, Concha Velasco agradeció el apoyo de su familia, de sus hijos, y su comportamiento "espectacular", al afirmar que "no tengo palabras para decir lo que he sentido". También ha sido "maravilloso" las llamadas de sus compañeros de profesión, "incluso de quienes no me habían llamado o no teníamos una amistad cercana", así como el cariño que ha recibido del público, "de la gente por la calle. Me siento muy querida y por eso también tengo la enorme responsabilidad de demostrar una vez más que mi pasión es el teatro".
Sobre la posibilidad de trabajar con su hijo Manuel en alguna producción cinematográfica, ha dicho que "ya me gustaría a mí, pero no me quiere como actriz, aunque creo que cuando vea 'Olivia y Eugenio' se va a dar cuenta de que soy una actriz muy estimable", bromeó.
"LOS MÉDICOS NO ME DEJAN HACER MÁS TRABAJO, ME TENGO QUE CUIDAR MUCHO, HACER LO QUE ME MANDAN, NO PONERME AFÓNICA"
Asimismo, indica que ha regresado al programa 'Cine de barrio', "que me gusta muchísimo, me lo paso muy bien viendo esas películas estupendas del cine español, tan denostadas en una época y ahora resulta que todos decimos qué buen cine se hacía antes".
Velasco ha asegurado que "vivo el presente, y espero que mi presente sea un futuro para mi nieto mejor que el presente que tenemos y no me paso la vida mirando para atrás, ni con ira ni sin ira" e insiste, "me encanta hacer 'Cine de barrio', es algo que disfruto mucho".
Sin embargo, "los médicos no me dejan hacer más trabajo y hay una cosa tremenda que voy a echar de menos que es hacer dos representaciones, solo puedo hacer una y lo siento por Jesús Cimarro, a quien dejé colgado con una gira brillante, con veinte compañeros que se quedaron en el paro, que tuvo que devolver entradas en algunos teatros, y ha vuelto a confiar en mí para hacer una obra, sabiendo lo malita que he estado", manifestó.
Por ello, ahora "me tengo que cuidar mucho, hacer lo que me mandan, no ponerme afónica, no puedo tomar ningún tipo de medicación, ni cortisona ni todas esas burradas que yo hacía cuando estaba afónica y Concha Velasco, ilusionada, vuelve al trabajo tras su enfermedad.
