MADRID, 5 Dic. (CHANCE) -
Dentro de pocos días, el 13 de diciembre, se cumplirá el quinto aniversario de la muerte de Enrique Morente. El cantaor falleció a los 67 años a causa de unas lesiones derivadas de una fuerte hemorragia.
Desde ese momento, la familia Morente luchó en los tribunales por lo que ellos consideraban una "grave negligencia médica". En 2013, la causa contra el doctor Moreno y parte del equipo de la Clínica La Luz de Madrid quedaba archivada por el Juzgado de Instrucción número 52 de Madrid. La justicia señalaba que no se había justificado de una "forma debida" la existencia del delito.
Hoy, su hija Estrella ha recordado a su padre en Twitter mostrando su enfadado e indignación con estos mensajes:
"No se opere nadie en puente en una clínica privada; si el que te ha operado va a la sierra o a su chalet, no llega así que te da una hemorragia y te mueres".
"Y sobre todo, no te fíes si te pide una cantidad económica desorbitada para operarte en pleno puente sin su equipo y sin las pruebas necesarias".
"A mi padre lo asustó una basura que nada más quería dinero y lo operó un día como hoy, y cuando se desangraba no estuvo, no llegó a tiempo"
"Disculpad mi necesidad de compartir con vosotros el recuerdo y el dolor de semejante injusticia".
"Aquel día cantaba en Granada y mi padre me pidió que no faltase a mi compromiso con mi trabajo, hoy lo hago en Lisboa como él me lo pidió".
Para terminar con una frase que le dijo su padre, el gran Enrique Morente: "El arte nos salvará de todo Estrella y el trabajo dignifica a las personas, no se te olvide".
ENRIQUE MORENTE, UNA FAMILIA ROTA EN DICIEMBRE DE 2013
Enrique Morente ingresó en la Clínica La Luz el 2 de diciembre de 2010. Los médicos le diagnosticaron un cáncer de esófago de estadio III que requería intervención quirúrgica rápidamente.
El cirujano Enrique Moreno operó al cantaor días más tarde, una intervención de la que salió bien. Su viuda, Aurora, lo contó así en Telecinco: "En la primera operación, entra en quirófano y sale bien. Esa noche la pasó dormido y a las seis de la mañana me colé en la UVI y le vi. A las diez, voy a la habitación viene la mano derecha del doctor Moreno y me dice que me vaya a casa".
Pero en las horas posteriores, el artista sufrió un fuerte empeoramiento que le llevó a ser intervenido por segunda vez esa misma noche. Este es el punto que la familia Morente señala como causa del fallecimiento, el retraso en esta nueva operación.
"El forense reconoce que si a Enrique Morente le hubieran operado antes, estaría vivo", explicaba Javier Conde en el mismo programa de El Gran Debate, y añadía: "Fue literalmente imposible porque no existían cirujanos un sábado por la noche. El señor forense omite cualquier dato desde las 2:05 hasta las 3:30 de la mañana".
Por su parte, el doctor Moreno habló dos años después de los hechos para El Mundo y explicó: "Mis manos están tranquilas; dejo las preocupaciones fuera del quirófano. Aunque eso no quiere decir que tenga la piel insensible".
