MADRID, 21 May. (CHANCE) -
Comienza el camino del Rocío y por supuesto, como todos los años, no podían faltar las pisadas de Fran Rivera durante la romería. En esta ocasión echará de menos a su esposa Lourdes, que se queda en casa para descansar y cuidarse en su estado.
Sin embargo el torero sí tiene motivos para sonreír por otro lado, ya que los problemas de hermanos, parece ser que se han solucionado. Tras un breve encuentro casual en la estación ferrocarril de Santa Justa con Kiko Rivera, con el que se abrazó cariñosamente, se demuestra que las diferencias que los separaron a raíz de las declaraciones que hizo el dj sobre la herencia de su padre, han quedado atrás, aunque de manera muy discreta.
Recordamos que el pequeño de los Paquirri indicó en un programa de televisión que no pretendía repartir la herencia de su padre con sus dos hermanos. Un tema que no sentó nada bien a Fran, pero que como ha reiterado, son hermanos ante todo.
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Por su parte, Cayetano también se ha mostrado muy reservado con el asunto. Desde el principio prefirió quedarse al margen de los problemas que pudieran sugir entre Fran y Kiko, porque para él, es un tema que debían solucionar entre ellos y poder llegar así al reencuentro que se ha producido.
