MADRID, 22 Mar. (CHANCE) -
El pasado 12 de marzo en Sevilla Kiko Rivera e Irene Rosales bautizaban ante una gran expectación a su hija Ana. Un evento al que asistieron familiares y amigos de la pareja, pero también estuvo marcado por la ausencia de los hermanos de Kiko, Francisco y Cayetano Rivera. Sin embargo, en los últimos días se habla de lo que sucedió dentro de la celebración.
Y es que el DJ para sorpresa de todos los asistentes decidió pedir públicamente matrimonio a la madre de su hija ante la atenta mirada de todos. Y hasta el momento, el anillo de compromiso está siendo objeto de críticas. Por su parte Kiko Rivera continúa en su sintonía de no hacer comentarios al respecto para no seguir alimentando la polémica.
Sin embargo, quien sí ha querido habar ha sido Irene Rosales, quien parece no tiene en cuenta a quienes critican su anillo de compromiso: "A mí nunca me ha importado lo que digan. Por lo tanto no me va a importar eso".
Ambos se preparan para vivir la Semana Santa Sevillana, sin importarles el qué dirán. Ahora después de celebrar el bautizo de la nieta de Isabel Pantoja, tendrán que comenzar con los preparativos del enlace más esperado.
