MADRID, 30 Nov. (CHANCE) -
A José Ortega Cano le ha sentado el divorcio con Ana María Aldón fenomenal. Atrás quedaron los malos tiempos en los que el torero estaba en el foco mediático por las terribles declaraciones que Rocío Carrasco hizo de él en su documental o por su separación con su exmujer, ahora, lo está porque está disfrutando de la vida como nunca.
Este miércoles nos hemos despertado con una exclusiva de la revista Semana que nos ha dejado boquiabiertos: José, acompañado de una amiga. Parece que el torero está saboreando de nuevo su tiempo libre y se ha dejado ver disfrutando de la noche madrileña con su hermana Mari Carmen, Aniceto y una tercera compañía con la que se le ha visto muy cariñoso.
Hace escasamente unos minutos, hemos podido hablar con el diestro con su apoderado llegando a Madrid y le hemos preguntado, cómo no, por estas imágenes de la publicación en la que podemos ver que ha encontrado un apoyo especial tras su divorcio con Ana María, pero lo cierto es que Ortega ha preferido no hacer ninguna declaración.
Eso sí, le hemos visto tranquilo y relajado antes las cámaras de prensa. Una actitud que llevábamos tiempo sin ver ya que las polémicas que han azotado su vida le han provocado una gran desestabilización que ha pagado con los medios de comunicación. Ahora, la calma es la protagonista de su rostro.
Tampoco nos ha querido decir nada de la entrevista que ha dado Gema Aldón para la revista Lecturas, en la que ha asegurado -entre otras cosas- que se sintió abandonada por su madre cuando ésta lo dejó todo para instalarse con el torero en Madrid. Además, ha confesado que la colaboradora ha vendido la casa en la que ella vivía para poder comprarse ese chalet en El Casar. Unas llamativas declaraciones de las que el torero no ha hecho ningún comentario.
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