MADRID, 23 Nov. (CHANCE) -
"Es un tema privado, con eso es suficiente y yo creo que con eso te contesto" nos contestaba Ana María Aldón esta mañana cuando la pillábamos saliendo de una notaría y no desvelaba si acudía allí debido a algún trámite del nuevo hogar que ha adquirido o por la firma del acuerdo de separación.
Esta tarde nos hemos encontrado con José Ortega Cano y lo cierto es que nos ha llamado especialmente la atención la actitud que ha tenido delante de las cámaras de televisión ante dos preguntas que le hemos hecho. La primera de ellas es si ha podido conocer ya la casa que se ha comprado su todavía mujer y la segunda, sobre sus imágenes en un tablao flamenco el día antes del cumpleaños de ésta.
El torero, tranquilo y con gafas de sol en mitad de la noche, llegaba a su casa, abría la puerta y se introducía en ella sin articular palabra. De esta manera, parece que Ortega no quiere hablar, ni siquiera saber nada, de la nueva vida que va a emprender su todavía mujer ahora que la separación es un hecho y una realidad.
Ana María ha querido llevar estas semanas con total discreción la nueva casa que ha adquirido, pero este miércoles la Revista Semana ha publicado en exclusiva que el adosado se encuentra en El Casar, Guadalajara, un sitio tranquilo y una casa amplia, justo lo que ella quería.
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