MADRID, 3 Ago. (CHANCE) -
Con el público entusiasmado y con la expectación digna de cualquier estrella, Julio Iglesias reapareció anoche en Tarragona para levantar el Festival Internacional de Música de Cambrils, una de las pocas citas del cantante en nuestro país.
Julio demostró estar en plena forma y presumió de una recuperación sorprendente después de haberse aislado de los escenarios por graves problemas de espalda, que le llevó a pasar por quirófano hace un año.
El 'truhán' no solamente consiguió levantar al público, sino que mostró su faceta más afable haciéndose selfies con los asistentes al espectáculo, que enloquecieron con los dotes del artista. Entre los espectadores VIPs se encontraba Luis del Olmo acompañado por su mujer, buen amigo del cantante que no ha querido perderse el paso del World Tour 2016 por nuestro país.
Julio demostró que sigue siendo un seductor bromeando con sus bailarinas y consiguió las risas de los fieles al santiguarse mientras contemplaba el contoneó de caderas de una de las chicas, a la que acariciaba cariñosamente por la espalda, una actitud que nos recuerda a las actuaciones de su hijo Enrique Iglesias, que no pierde oportunidad de "tontear" con su equipo de baile siempre que tiene ocasión, y es que quien a lo suyo se parece, honra merece.
Julio ya ha arrasado en La Palma, en Santa Cruz de Tenerife y en Las Palmas de Gran Canaria, y ha elegido Cambrils para despedirse de nuestro país antes de volar a América y darlo todo en EE.UU, México, Puerto Rico, Argentina y Chile, cerrando el año en Australia.
