MADRID, 25 Abr. (CHANCE) -
Justin Bieber vuelve ser el centro de atención... de los ojos de la Ley. Y es que el cantante fue ayer detenido en el aeropuerto de Los Ángeles cuando regresaba de un viaje a Japón con su madre y unos amigos. Según Hollywood Life, los agentes del servicio de inmigración le interrogaron durante cuatro horas, aunque se desconocen las causas del de la detención y los temas de los que hablaron.
Finalmente, Justin fue puesto en libertad y pudo marcharse a casa. El cantante mantuvo en todo momento una actitud divertida y dedicó sonrisas tanto a la prensa como a los fans que se encontraban en el aeropuerto.
Esta actitud impasible e irónica puede deberse a que el cantante está cada vez más acostumbrado a sus desencuentros con las autoridades. El 20 de enero fue detenido por la Policía de Miami por conducir a alta velocidad bajo los excesos del aclohol y la marihuana. Pero, antes de ello, el supuesto ataque del joven a un chófer en Toronto también fue causa de polémica.
No obstante, sus fans continúan más fieles que nunca tanto en sus conciertos como en las redes sociales. De hecho, Justin fue aclamado durante su viaje por Asia, durante el cual visitó un orfanato para intentar sacar una sonrisa a los más pequeños. El propio Justin ha declarado que se siente muy feliz por esta visita y que adora y admira a esos niños.
