MADRID, 20 May. (CHANCE) -
A algunas les da por un cambio de look radical, otras lloran por las esquinas o se van de fiesta con las amigas, pero Kylie Jenner gestiona una separación comprándose una señora mansión.
La hija de Kris Jenner es, con poco más de 18 años, una de las jóvenes más adineradas de Los Ángeles, y emulando a sus hermanastros, alardea de ello. La celebridad, que finalizaba su noviazgo con Tyga hace una semana, ha puesto en venta su primera casa en propiedad, adquirida el año pasado por 2.700.000 dólares, y se prepara para empezar de nuevo en una lujosa residencia que le ha costado la friolera de seis millones de dólares.
El 'casoplón' se encuentra en Calabasas, muy cerca de la residencia de su hermanastra Kim Kardashian, y su cuñado, Kanye West, y de la de su madre. Al nuevo hogar de la empresaria y diseñadora de moda no le falta detalle: seis dormitorios, siete cuartos de baño, una piscina, una amplia bodega y un vestidor de ensueño. Todo ello repartido en los más de 650 metros cuadrados que tiene la vivienda.
Pero hay más. Varios medios estadounidenses apuntan a un nuevo hombre en su vida. A rey muerto, rey puesto, o mejor dicho: A rapero muerto, rapero puesto, porque Kylie habría intimado con Party Next Door, músico canadiense cuyo nombre real es Jahron Brathwaite. Hace apenas una semana, el cantante de hip hop colgó una fotografía de su mano izquierda entrelazada con la de ella, ambos con unos espectaculares relojes de oro y brillantes. ¿Será postureo o querrá darle celos Kylie a su ex pareja? Pronto, el desenlace.
