NUEVA YORK, 13 Ago. (EUROPA PRESS) -
Cinco meses después del fallecimiento de su esposa, el actor Liam Neeson acudió a la 'premiere' de su última película 'Five minutes to heaven', historia real basada en el terrorismo y la reconciliación en Irlanda del Norte.
La última vez que Neeson pisó la alfombra roja fue en el estreno de 'The other man' y lo hizo del brazo de su mujer. El miércoles por la noche tuvo que hacerlo sólo y en algunos momentos se pudo ver al actor bastante afligido.
El actor, de 57 años, atendió a la prensa en un hotel de Nueva York y dejó claro que las preguntas personales quedaban excluidas. A pesar, de que se habló únicamente del filme, Neeson pareció abstraído la mayor parte del tiempo.
En un momento de la noche, según publica 'Daily Mail', el actor abrazó a Oliver Hirschbiegel, director de la película, en busca de apoyo moral.
Neeson, irlandés de nacimiento, estaba casado con la también actriz y ganadora del premio Tony por la película 'Cabaret', Natasha Richardson, con la que tenía dos hijos.
Ésta murió el pasado marzo, a la edad de 45 años, después de un accidente sufrido mientras asistía a lecciones de esquí. Al parecer en el primer momento, Richardson pensó que no había sufrido ningún daño. De hecho, ésta se levantó por sí misma y dijo a los presentes que no necesitaba ninguna ayuda.
Una vez en su hotel, la actriz comenzó a dotar fuertes dolores de cabeza, por lo que fue traslada al hospital donde finalmente falleció a consecuencia de un derrame cerebral.
Un periodista preguntó a Neeson sobre cuál era su idea del paraíso, a lo que el actor contestó que para él el cielo era estar junto a sus dos pequeños.
