MADRID, 29 Jul. (EUROPA PRESS) -
A punto de cumplir un año de casados, la modelo Marisa Jara y el empresario Chente Escribano han confesado que ya les ha picado el gusanillo de la paternidad. Además, tanto el empresario como la modelo, que viven centrados en sus respectivos trabajos, han declarado que están "muy contentos" a punto de celebrar su primer aniversario de boda.
Se casaron el pasado mes de septiembre en una romántica boda en Ibiza y en todo momento hablaron de su intención de ampliar la familia pasado algún tiempo. Por fin, y a punto de cumplir su primer año como casados, Marisa Jara y Chente han confesado que están intentado ir a por su primer hijo.
Siguen tan enamorados como el primer día y sólo tienen palabras positivas para definir su matrimonio. No sólo están "muy contentos", sino que, además, la modelo y el empresario confiesan que el tiempo se les ha pasado volando.
Instalados en México por motivos de trabajo, la feliz pareja disfrutó de unos días de descanso en España, durante los cuales confesaron que ya se están planteando muy seriamente ampliar la familia.
"A mí me encantaría que para ya y a él también, pero vamos a esperar un poco", explicaba Marisa cuando le preguntaron para cuándo su primer hijo. "Cuando vengan, encantados. Estamos intentándolo".
