LOS ANGELES, 21 Dic. (EUROPA PRESS) -
Con la Navidad a la vuelta de la esquina, los sentimientos están a flor de piel, la gente se llena de paz y de alegría aunque, a veces, la nostalgia también invada estas fechas, sobre todo por los que no están. Todos tenemos deseos para el nuevo año y el de Nicole Kidman es que sus hijos adoptivos vivan con ella.
La actriz australiana adoptó a Isabella, de 18 años, y Connor, de 15, cuando estaba con su ex marido Tom Cruise y ahora está dolida y muy triste por la decisión de ambos de irse a vivir con su padre, su mujer Katie Holmes y la preciosa Suri, de 4 años.
Pero como muy bien dice la propia Nicole, ella no puede luchar contra su voluntad. "Viven con Tom. Fue su elección", declaró. "Me encantaría que vivieran conmigo pero, ¿qué puedo hacer?", añadió Kidman.
Aunque la artista está disgustada porque sus hijos no quieran vivir con ella, está encantada con el hecho de haberse vuelto a convertir en mamá con el paso de los años, dando a luz a una guapísima Sunday Rose, fruto del amor por su marido Keith Urban en julio de 2008.
"Es algo fantástico tener una niña de dos años y medio con 43 que tengo yo", dijo Nicole. Para explicar el extraño nombre que le puso a su hija, Kidman desveló que eligieron Sunday (
Domingo) porque es el día de la semana en el que sus padres más disfrutan el uno del otro, puesto que cuando no tienes a alguien en tu vida, los domingos pueden llegar a ser tremendamente aburridos.
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