MADRID, 23 Jun. (CHANCE) -
Johnny Depp se ha metido en un buen lío. El pasado jueves el actor acudía al Festival de Glastonbury donde bromeó sobre la posibilidad de asesinar al presidente de EE UU, Donald Trump, algo que podría ser un delito de amenazas.
El actor siempre ha sido muy crítico con Trump desde su campaña electoral. Pero esta vez, Depp podría meterse en problemas de verdad. Uno de los numerosos comentarios que hizo durante la noche podría hacer que recibiera la llamanda del FBI: "¿Cuándo fue la última vez que un actor asesinó a un presidente?". Con esta pregunta se refería probablemente a cuando el actor John Wilkes Booth asesinó a Abraham Lincoln en 1865 de un disparo en la cabeza mientras este se encontraba en el teatro.
A esta pregunta el actor añadió que: "Ya pasó hace tiempo, puede que sea tiempo que alguien lo haga de nuevo". Con estas palabras el protagonista de Piratas del Caribe podría llegar a tener serios problemas.
Pero Johnny no es el primer famoso estadounidense que habla sobre el posible asesinato del presidente Trump. Madonna dijo en Washington que pensaba mucho sobre hacer estallar la Casa Blanca y el rapero Snoop Dogg disparó con una pistola de juguete contra un personaje de Trump en un vídeo. Pero a Donald Trump no le gusta callarse y contestó a muchas de esas amenazas por parte de los artistas. Uno de los más sonados fue el de Madonna a la que le respondió que era "una asquerosa".
