MADRID, 8 Jul. (CHANCE) -
Todo el mundo estaba esperando este momento y por fin ha llegado. Aunque tendremos que esperar a mañana para decir que Tamara Falcó e Íñigo Onieva ya son 'marido y mujer', esta noche están disfrutando al máximo de su preboda. El Hotel Ritz de Madrid se ha convertido en el escenario perfecto para congregar a todos sus seres queridos 24 horas antes de su 'Sí, quiero' y su llegada ha sido de lo más aplaudida por todos los allí presentes.
Hasta las inmediaciones del hotel se han desplazado muchos fans de la pareja que no se han querido perder cómo los novios llegaban a la fiesta. Lo han hecho por separado, lejos de aparecer de la mano y pregonando su amor a los cuatro vientos, los dos tortolitos han preferido hacer su entrada triunfal de forma individual.
Primero ha llegado Íñigo, que entraba a los jardines del Ritz por la alfombra roja que el hotel desplegaba en la puerta lateral y Tamara lo ha hecho por la puerta principal. Muy sonrientes, ambos han agradecido a todos los allí presentes reflejando la gran felicidad del momento.
Tamara se bajaba del coche luciendo un impresionante dos piezas de Pedro del Hierro, de blanco impoluto, y confesaba a su legada que se encontraba "muy bien" además de "muy contenta" por haber hecho su sueño realidad.
Por su parte, Íñigo hacía su entrada triunfal recibiendo un fuerte aplauso por parte de todas las personas que estaban allí congregadas. Visiblemente nervioso y algo desorientado por la cantidad de gente que se agolpaba en la alfombra roja, el empresario entraba luciendo una sonrisa e incluso aplaudiendo.
Cargando el vídeo....
Cargando el vídeo....
