MADRID, 21 Ago. (CHANCE) -
El pasado viernes veíamos como Piqué llegaba al domicilio de Shakira para dejar a sus hijos después de haber disfrutado con ellos quince días. Sin bajarse del coche, el futbolista esperaba a que la artista o alguien del interior abriese la puerta del garaje y cuando esto sucedió, fueron los menores quienes se bajaron del vehículo para meterse en el interior.
Este sábado la artista recibió otra visita, la de su hermano Tonino. Lo cierto es que es una de las personas que no se ha separado de su lado en todos estos meses desde que se confirmó la separación entre ambos. Todos los días le hemos visto pegado a su hermana desinteresadamente, preocupándose no solo por su bienestar, sino también por el de sus sobrinos.
De esta manera, Tonino llegaba al domicilio de la cantante y cuando se bajaba del coche se quedaba paralizado en la calle varios segundos para coger su teléfono móvil y grabar a los medios de comunicación que se encontraban en las inmediaciones. Un gesto que nos sorprende porque siempre ha sido de lo más simpático con la prensa y ha respetado el trabajo de los profesionales de la comunicación.
A la que no hemos visto todavía estos días es a la cantante, que después de pasar los peores meses de su vida por la separación con Piqué, parece que va levantando cabeza, volcada al cien por cien en su trabajo y en su familia.
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