MILAN, 1 Abr. (EUROPA PRESS) -
El prestigioso dúo de diseñadores italianos ha salido airoso de la acusación por delito de evasión de impuestos por la que podrían haberse enfrentado a siete años de cárcel. Aunque todo ha salido bien para Domenico y Stefano, lo cierto es que bastante les va a costar limpiar su imagen y volver a tener los beneficios incalculables que tenían antes.
Dolce & Gabbana habían sido acusados de defraudar a Hacienda por un delito de evasión de impuestos que ascendía a más de mil millones de dólares entre los dos. Según parecía, ambos diseñadores evadían los impuestos italianos tasando los mismos en una tienda con sede en Luxemburgo, donde el índice es mucho menor.
Domenico y Stefano solo podían esperar a que este viernes un juez de Milán dictaminara si el fiscal había reunido pruebas suficientes para impurtarles. Y parece ser que no. Este mismo 1 de abril, el magistrado Simone Luerti, encargado del caso, ha decidido que no hay claras evidencias para proceder.
La sentencia máxima a la que podrían haberse enfrentado era de cinco años de prisión, aunque teniendo en cuenta las características de esta situación, la condena podría haber llegado hasta los siete. Pero llegados a este punto y como ha dicho el juez, el caso está cerrado.
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